Las constructoras y los bancos que controlaban las nueve autopistas de peaje quebradas y 'rescatadas' por el Estado están presentando una 'cascada' de recursos ante el Tribunal Supremo, a la que se acaban de sumar ACS y Sacyr, como queja por la fórmula que el Gobierno ha fijado para calcular la factura que estas vías supondrán para las arcas públicas. Y es que este sistema de cálculo establece que el importe no podrá superar los 3.305 millones de euros.
Sacyr gana un 11% más en el primer semestre de 2019. La constructora ha registrado un beneficio neto de 80 millones de euros entre enero y junio, según ha indicado en un hecho relevante remitido a la CNMV. En el, destaca además el incremento de su cifra de negocio (+11%) hasta los 2.009 millones.