Semana de abultadas pérdidas en los parqués mundiales, que se han visto lastrados por los conflictos bélicos, el repunte de la rentabilidad de los bonos soberanos y los temores a una desaceleración de los beneficios empresariales. En el caso español, el Ibex 35 se ha dejado un 2,21%, lo que le ha llevado a perder importantes niveles de soporte.