Seat desmiente los rumores de repercusiones en sus plantas tras el cierre de Nissan
La noticia de que Nissan echa el cierre en Cataluña ha caído como un jarro de agua fría sobre trabajadores y sindicatos, que llevaban meses presionando a los directivos de la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi para provocar un cambio en una decisión que muchas fuentes sectoriales habían anticipado. La coyuntura de la Covid-19 ha servido de excusa a la nipona para resolver sus operaciones en la región y el temor se traslada a otros fabricantes como Seat, buque insignia de la automoción en España, sobre la que se proyecta la alargada sombra de las dificultades políticas que atraviesa Cataluña. Fuentes de la empresa niegan a Bolsamanía cualquier plan en este sentido, a pesar de rumores que apuntan en otra dirección.