La Comisión Europea ha propuesto este jueves que los operadores de plataformas en los sectores del transporte de pasajeros y de alojamientos turísticos de corta duración, como es el caso de Uber o Airbnb, entre otras, sean responsables de recaudar y remitir el IVA a las autoridades fiscales cuando los proveedores de servicios no lo hagan para evitar una ventaja injusta respecto a taxis y hoteles.