El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, ha asegurado esta madrugada que EEUU “no busca una confrontación con China”. “Buscamos un terreno equilibrado, mercados abiertos, comercio justo y respeto por nuestros valores”, ha asegurado durante un discurso. Hubo nuevos desarrollos en la disputa comercial entre ambos países: Pekín ofreció comprar 20.000 millones en productos agrícolas estadounidenses en el primer año si la administración Trump accede a un acuerdo comercial parcial.
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"No buscamos contener el desarrollo de China. Queremos una relación constructiva con los líderes de China, como la que hemos disfrutado desde hace generaciones con la población de China", ha indicado.
De esta forma, ha reiterado que las relaciones entre ambos países "deben ser consistentes con la justicia, el respeto mutuo y las normas internacionales del comercio" y ha lamentado que el PCCh "parezca resistirse a una verdadera apertura o una convergencia con las normas globales".
"Seguiremos negociando de buena fe con China para lograr reformas estructurales largamente esperadas en nuestra relación económica", ha dicho, antes de recordar que el propio Trump se ha mostrado este jueves optimista sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo.
"Trump ha forjado una fuerte relación personal con el presidente (de China) Xi (Jinping). Sobre esta base, seguiremos buscando formas de fortalecer nuestra relación para el beneficio de ambos pueblos", ha indicado.
Por último, Pence ha incidido en que las autoridades estadounidenses "creen fervientemente" que ambos países "pueden y deben trabajar para compartir un futuro pacífico y próspero juntos".
