El presidente de los EEUU, Donald Trump, siempre se ha jactado de haber amasado él mismo su fortuna, una afirmación que podría no ser cierta. Según informaciones publicadas por el 'New York Times', el presidente estadounidense habría alzado su emporio sobre una herencia de sus padres, una suma millonaria que habrían logrado a través del fraude fiscal.
Explica el medio estadounidense que el republicano heredó 400 millones de dólares de su familia, gran parte de los cuales se habrían logrado a través de estafas y fraude fiscal. Usando complicados esquemas como empresas ficticias, explica el diario.
Según explica, a los tres años Trump ya recibía 200.000 dólares anuales de su padre y a los ocho era millonario. Una imagen lejana a la de "self-made man" que proclamó durante su campaña electoral en 2016 y en su libro "El arte de la negociación".
A su muerte, los progenitores del polémico magnate dejaron unos 1.000 millones de dólares a sus hijos, de los que sólo declararon al fisco un 5%. Es decir, pagaron 52,2 millones de dólares por esta cuantiosa suma, mientras que la tasa impuesta en la época a regalos y herencias era del 55%, por lo que las obligaciones se elevarían a 550 millones de dólares.
La Casa Blanca ha señalado, mediante un comunicado que “las acusaciones de fraude son falsas y altamente difamatorias. "Nadie cometió fraude ni evasión fiscal. Los hechos en los cuales el Times basa sus falsas acusaciones son extremadamente imprecisos", añadió.
