El precio del barril West Texas Intermediate, de referencia para Estados Unidos, ha experimentado un incremento del 4,1%, hasta situarse en los 54,06 dólares. Pese a que llevaba toda la jornada moviéndose al alza, se ha disparado después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara que había hablado por teléfono con el presidente de China, Xi Jinping.
En las últimas semanas, la relación entre Washington y Pekín se había enfriado después de que la última ronda de negociaciones comerciales entre ambos bloques se paralizara y los países comenzaran a imponer nuevos aranceles a las importaciones del otro.
Tras la conversación telefónica, los máximos mandatarios de Estados Unidos y China han acordado reunirse en el marco de la cumbre del G20 que se celebrará en Japón el 28 y 29 de junio. Esto ha provocado que el precio del barril de referencia para el país norteamericano se elevara. De su lado, el barril de Brent, de referencia para Europa, también comparte la racha alcista y ha avanzado un 2,2%, hasta situarse en un precio de 62,3 dólares unitarios.
De esta forma, el precio de crudo ha recuperado parte del terreno perdido la semana pasada, cuando experimentó varios descensos consecutivos después de que dos buques petroleros tuvieran que ser evacuados en el golfo de Omán al haber sufrido ataques de autoría todavía desconocida. Estados Unidos, desde entonces, ha publicado varios vídeos e imágenes tratando de acusar a Irán de los incidentes.
