MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
Toyota Motor Corporation y Daihatsu Motor han anunciado este lunes su decisión de reformar la estructura empresarial en el extranjero de ambas compañías en la que la división de Automóviles Compactos en Mercados Emergentes será disuelta y, por tanto, Toyota asumirá la responsabilidad de los negocios en el extranjero, desde el desarrollo hasta la certificación, mientas que Daihatsu asumirá su desarrollo real, según explican en un comunicado.
En concreto, se traspasará la función de planificación de productos de Automóviles Compactos en Mercados Emergentes que abarca a Toyota y Daihatsu a la Compañía de Automóviles Compactos de Toyota.
Dado que la Compañía de Automóviles Compactos de Toyota será el contratista de Daihatsu, Toyota será responsable de todo el proceso, desde el desarrollo hasta la certificación.
Asimismo, se establecerá una estructura de implementación para prevenir rigurosamente la recurrencia de irregularidades procedimentales en Daihatsu, en línea con los recursos y las condiciones reales de la empresa, con el objetivo de "fabricar vehículos cada vez mejores" y realizar una "sociedad de movilidad aprovechando las fortalezas de Daihatsu".
Toyota anuncia que también se transferirá la función de gestión empresarial y de productos de Daihatsu a su propia Unidad de Negocios y Ventas. Además, otras áreas relacionadas con la subcontratación, incluida la gestión y optimización de recursos, también serán movidas a Toyota para fortalecer la asociación.
Por otro lado Toyota Daihatsu Engineering & Manufacturing y Toyota Motor Asia Pacific se convertirán en las sedes regionales en Asia, pertenecientes a la región de Asia de Toyota, y se renombrarán como 'Toyota Motor Asia'. Toyota espera que con este cambio estructural las dos compañías en la región sean más autosuficientes y aumenten su colaboración.
Esto cambios, que se realizarán de forma secuencial y siguiendo el c alendario de cambio de modelo, se dan tras el escándalo de certificación de vehículos en el que se vio envuelto el fabricante japonés, por problemas de seguridad de su filial, Daihatsu.
El pasado diciembre, Toyota ya había informado de que suspendía las entregas de su filial Daihatsu debido a problemas de seguridad detectados tras una investigación independiente sobre problemas anteriores que constataron nuevas irregularidades.
En enero Toyota también había anunciado el reemplazo del presidente de Daihatsu Motor, colocando al frente a Masahiro Inoue, como parte de los cambios que ha realizado en su filial el fabricante.
Toyota busca que estas nuevas reformas a la estructura de su empresa logren que Daihatsu se convierta en un "empresa de movilidad centrada en minivehículos en el futuro".