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El coste de la recarga y la reducción de gastos en mantenimiento serían las principales razones

MADRID, 12 (EUROPA PRESS)

Las pequeñas y medianas empresas podrían ahorrarse hasta 14.000 euros en tres años por furgoneta si optan por el cambio de los modelos de combustión al vehículo eléctrico, según las conclusiones publicadas este jueves del informe 'La economía del uso de vehículos comerciales en Europa 2024' elaborado por el Centre for Economics and Business Research encargado por la división de vehículos comerciales de Ford.

A los tres años, tal y como recoge el documento, las furgonetas eléctricas se amortizan "con creces" gracias a la reducción del costes de la recarga --en comparación con llenar el depósito de gasolina o diésel-- y los menores gastos en mantenimiento.

Asimismo, Ford Pro estima que los costes de mantenimiento y reparación son un 40% más bajos para, por ejemplo, su modelo eléctrico E-Transit que para los vehículos diésel equivalentes.

Esta caída de los costes de explotación beneficiaría a las pequeñas empresas que deberían seguir, a juicio del estudio, el camino emprendido por las grandes flotas, con más recursos, que ya están electrificando sus flotas de movilidad.

En este contexto, las empresas más beneficiadas de este cambio serían las francesas donde el uso de la energía para la propulsión de las flotas podría suponer un ahorro de hasta 19.000 euros por furgoneta. Ahorro respaldado por los precios de la energía en el mercado galo --bajos gracias a la integración de la nuclear en el mix energético-- y la diferencia de precio entre un coche eléctrico y uno de combustión una vez aplicadas las ayudas públicas a la compra.

Las empresas en España pueden ahorrar hasta 16.000 euros; en el Reino Unido, hasta 14.000 euros; en Italia, hasta 12.000 euros; y en Alemania, hasta 11.000 euros. En los cinco mercados, el ahorro medio es de 14.000 euros. También se pueden obtener otros ahorros gracias a la exención de los pagos exigidos tras entrar en el creciente número de zonas de bajas emisiones.

"Las pequeñas empresas son la base de la economía europea, y el hecho de que incorporen furgonetas eléctricas es un paso fundamental para la electrificación de las carreteras", ha comentado el director general de Ford Pro Europa, Hans Schep.

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