MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
Nissan admitió el pasado mes de julio haber falsificado las pruebas de medición de gases que se encuentran dentro del proceso de inspección final de vehículos (Kanken) en Japón y ha achacado el problema al aumento de la producción y a la falta de supervisores y de equipos, según detalló en un informe.
La firma japonesa, que ya mostró su arrepentimiento por su "mala conducta", descubrió que en sus plantas nacionales y en las de sus filiales, excepto en Nissan Kyushu, las pruebas de emisiones de escape y de economía de combustible en sus modelos "se desviaron del entorno prescrito", por lo que se crearon informes de inspección basados en valores de medición "alterados" e informó al Ministerio de Territorio, Infraestructura, Transporte y Turismo de Japón.
Nissan ha informado ahora de que se vieron afectados un total de 1.205 vehículos, frente a los 1.171 que anunció inicialmente el 9 de julio.
El fabricante nipón ha asegurado no contaba en Japón con el número suficiente de inspectores para la cantidad de trabajo que manejaba. Además, ha explicado que los trabajadores no fueron 'entrenados' como es debido y que no contaba con el equipo suficiente para las pruebas de emisiones de escape y de economía de combustible.
Asimismo, Nissan ha considerado que el centrarse en mejorar la productividad de sus factorías y cumplir con los objetivos generó irregularidades en el manejo de datos resultantes de las pruebas.