MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
Ferroglobe y Coreshell han firmado un memorando de entendimiento para suministrar el primer silicio metalúrgico del mundo apto para baterías de vehículos eléctricos, según han anunciado este martes.
Esta alianza permitirá desarrollar baterías de menor coste y mayor autonomía para vehículos eléctricos, sustituyendo grafito y composites Si/C base silano por silicio metalúrgico.
Así, la iniciativa pretende adelantar a las soluciones de silicio a base de silano y sustituir el grafito en las baterías de los vehículos eléctricos, que han supuesto un cuello de botella para la industria automovilística, creando limitaciones de coste y autonomía.
Los vehículos eléctricos siguen siendo muy caros tanto para los consumidores como para los fabricantes de automóviles, ya que las baterías suponen entre el 30% y el 40% del coste total de estos vehículos, han explicado desde Ferroglobe.
Por ello, los fabricantes de automóviles están interesados en utilizar silicio en las baterías, ya que puede almacenar hasta diez veces más energía en los ánodos que el grafito, lo que podría aumentar la autonomía en un 30%.
La tecnología de baterías patentada por Coreshell, que incorpora un recubrimiento único de los materiales en los electrodos, es "la única solución probada para mitigar la degradación del silicio micrométrico, evitando su rápida pérdida de vida útil y permitiendo al mismo tiempo el paso de los iones de litio".
El proceso de purificación metalúrgica patentado por Ferroglobe para producir hasta un 99,995% de silicio es eficiente y no utiliza ningún reactivo químico.
El director de tecnología e innovación, Benoist Ollivier, ha asegurado que creen que el silicio micrométrico para baterías es "el camino más rápido para descarbonizar la industria de la movilidad".
Asimismo, ha comentado que "cuando se unen la tecnología de baterías adecuada y el principal proveedor de silicio de Europa y Estados Unidos, pueden producirse grandes avances".
Por su parte, el consejero delegado de Coreshell, Jonathan Tan, ha explicado que "el problema hasta la fecha es que nadie ha sido capaz de liberar el poder del silicio metalúrgico, y el alto coste y los retos de escalado de los ánodos de silicio nanoestructurado o basados en silano han impedido que la industria se beneficie de su verdadero potencial".