Australia ha entrado en su primera recesión en casi 30 años mientras el país lucha contra el resurgimiento del Covid-19.
El PIB se desplomó un 7% en los primeros tres meses del año, la mayor caída desde los registros que datan de 1959. Esto, después de registrar un retroceso del 0,3% en el trimestre previo.
El descenso masivo de la economía, causado por los cierres relacionados con el coronavirus, se ha suavizado gracias a unos estímulos fiscales sin precedentes para mantener las empresas abiertas y la remuneración de los trabajadores.
Los economistas del Commonwealth Bank of Australia dijeron en una nota: "Nadie debería sorprenderse especialmente de que la producción caiga bruscamente cuando se cierran grandes partes de la economía. Esta fue una contracción manufacturada en la economía que fue un resultado directo de las decisiones de política para limitar la propagación de Covid-19".
SIGNO MIXTO EN ASIA
Las bolsas asiáticas han vivido este miércoles una jornada mixta, con alzas de más del 1,5% en el índice ASX australiano, y subidas también en el Nikkei (+0,4%). Las plazas chinas, sin embargo, han descendido muy moderamente.
"Los mercados asiáticos han asumido un tono positivo, inspirándose en las ganancias de Wall Street de este martes", señala Jingyi Pan, estratega de mercado de IG en Singapur. "Aunque la economía estadounidense no está ni cerca de como estaba antes del golpe del Covid-19, las evidencias de una recuperación continua, sin embargo, funcionan a favor de mantener el optimismo cauteloso y el repunte de las acciones", añade.
Wall Street terminó la pasada sesión con alzas del 0,7% en el Dow y el S&P y de más del 1% en el Nasdaq.
