Como nos temíamos, en los debates entre los líderes de los cuatro partidos políticos mayoritarios celebrados en la recta final de la campaña electoral tampoco se vislumbró ningún tipo de consenso para afrontar el problema de las pensiones.
Más bien al contrario, volvió a provocar un rifirrafe entre los candidatos. Tal y como ocurrió en el Pacto de Toledo, cualquier acuerdo entre fuerzas políticas parece una quimera. Mientras, el tiempo sigue corriendo en contra de la hucha de las pensiones, a la que apenas le quedan 5.000 millones de euros, dinero insuficiente para acabar el año.
Por muchos parches que se sigan poniendo, el modelo actual es insostenible. Gane quien gane las próximas elecciones, se encontrará con un problema que necesita soluciones urgentes y no vemos que la vía impositiva sea la adecuada.
Hasta que no nos concienciemos y, como ocurre en Estados Unidos, tengamos una cultura del ahorro para la jubilación, seguiremos arrastrando este lastre año tras año hasta que no haya presupuesto que pueda asumir las prestaciones a los jubilados ¿Qué pasará entonces?
Si somos previsores, y estamos obligados a serlo, debemos empezar ya a ahorrar vía fondos privados de pensiones. Hay casi 1.000 entre los que elegir. Un consejo: no aceptes el primero que te ofrezcan sin pensar antes. Calcula cuánto dinero vas a necesitar dentro de unos años, valora los costes del fondo de pensiones que vas a adquirir y destina una parte del dinero de tu nómina a hacer aportaciones periódicas. De esa forma, el futuro de tu jubilación no dependerá de los políticos porque estará en tus manos.