Todas las personas nacemos con espíritu emprendedor. Aunque se nos educa para que todos tengamos las mismas bases de aprendizaje, a no ser tan curiosos, y si destacamos en algo, se nos califica dentro de la misma escala que al resto de personas.
De ahí que nuestro espíritu emprendedor empieza a quedar en el olvido, en el baúl de los recuerdos, junto con nuestros sueños de querer saber y avanzar hacia aquello que nos gustaría.
Es entonces cuando empezamos a resignarnos o convencernos de que debemos hacer todo como lo hacen los demás, hacer todo “normal”… ser personas normales.
La verdadera razón es porque las personas normales no se atreven a hacer cosas diferentes a lo que se nos ha enseñado por miedo al riesgo, es decir, arriesgar para ganar. Donde hay una persona con éxito, en algún momento arriesgó algo.
Aunque en mi opinión, la verdadera locura no es arriesgar, sino seguir haciendo siempre lo mismo y esperar resultados diferentes.
Estas son algunas pautas que podemos aprender de las personas con éxito en sus inversiones y aplicárnoslas en nuestro día a día:
1.- Salirse de la mentalidad global. Si piensas y haces siempre lo mismo, no obtendrás resultados diferentes.
2.- Determinación y decisión. Determina dónde quieres llegar con convicción, sin dudas, y ve a por ello. Cambiar de mentalidad constantemente no te conducirá a buenos resultados, ya que si escoges un camino y a la mitad decides otro, no llegarás donde deseas.
Determina primero la meta y anda poco a poco hacia ella.
3.- La libertad tiene un precio. Los inversores de éxito saben que para tener ingresos continuos primero tienen que invertir. Invierten para ver multiplicados sus ingresos continuamente.
Esas mismas personas que ahora están en la cima, comenzaron invirtiendo todo lo que tenían porque creían fervientemente en sus objetivos, ¡¡eso sí es arriesgar!!
4.- Pensamiento positivo. La información negativa está en todos lados, encuentras palabras de desánimo en cualquier momento y lugar. El pensamiento positivo te ayuda a seguir adelante, es un inmenso y valorado tesoro que requiere dedicación y voluntad. La gente con éxito actúa a pesar del miedo.
5.- No te desvíes de la meta. Hay algo que todo inversor sabe: si quieres fracasar nada más emprender, sólo tienes que distraerte con otras cosas y no centrarte en dónde quieres llegar.
Así pues, enfócate en lo que te has propuesto conseguir. Si el camino que has escogido no da resultados, cambia tu estrategia pero nunca tu meta.
Las personas con éxito afirman que las claves pueden resumirse en tres palabras: aprendizaje, trabajo y mantener siempre una actitud receptiva. El éxito en tus finanzas personales será sólo cuestión de tiempo.
Para terminar, podemos desarrollar ésta conclusión tan sencilla como comprobable:
Arriesgar + Invertir = Éxito.