MADRID, 23 (Portaltic/EP)
Microsoft obligará a sus usuarios a actualizar los equipos a la nueva versión de Windows 10 cuando la que tengan instalada se acerque al fin de su soporte con el objetivo de garantizar la prestación de sus servicios y un uso más seguro
Con el lanzamiento de la nueva actualización de Mayo 2019 de Windows 10, Microsoft ha anunciado determinados cambios relacionados con las actualizaciones del software. A partir ahora, los dispositivos que se estén aproximando o ya hayan alcanzado el fin de su soporte de la versión que tengan instalada se actualizarán a la siguiente versión de manera automática.
La versión de Windows 10 de Abril 2018 para las ediciones Home y Pro alcanzarán el fin de su soporte en noviembre de 2019 y Microsoft empezará este proceso de distribución con aprendizaje automático con cierta antelación. En julio, todos los equipos del Windows 10 Abril 2018 y versiones anteriores estarán sometidos a la actualización para garantizar el soporte de la nueva actualización de Mayo.
El objetivo de este cambio, según Microsoft, es "seguir ofreciendo servicios a los usuarios y que tengan acceso a las actualizaciones de seguridad y mejoras del sistema", y se aplicará en la misma medida en todas las actualizaciones siguientes.
Otro cambio que ofrece la actualización de Mayo 2019 es el control sobre las actualizaciones periódicas, más o menos cada mes. Los usuarios que tengan Windows 10 de Mayo 2019 podrán posponer estás actualizaciones de seguridad y limpieza hasta 35 días. Además, estos reajustes dejarán de ser automáticos tendrán que ser aceptados manualmente por el usuario.