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Tesla se ha disparado este jueves un 9% en Wall Street. La compañía automovilística ha celebrado en el parqué sus resultados trimestrales, que certificaron su llegada a la rentabilidad por primera vez en su historia.
Tesla registró un beneficio de 311,5 millones de dólares en el tercer trimestre de 2018, lo que supone dejar atrás las pérdidas de los trimestres anteriores y el segundo de su historia con ganancias. La compañía califica este trimestre como “verdaderamente histórico”.
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La compañía registró unos ingresos en el periodo de 6.800 millones de dólares frente a los 14.200 millones que ingresó en el mismo periodo de 2017, lo que supone un retroceso de más del 50%.
La automovilística afirma que la producción del Model 3 durante este trimestre ha sido de unas 4.300 unidades por semana, y que la compañía ha conseguido cumplir con sus objetivos internos de eficiencia de costes. "El Model 3 ha sido el coche más vendido en Estados Unidos en términos de ingresos y el quinto más vendido en términos de volumen", concreta la compañía en un comunicado. El flujo de efectivo ascendió hasta los 881 millones de dólares.
De cara al próximo trimestre, Tesla pronostica que la producción y las entregas trimestrales del Model 3 "deberían seguir aumentando" en comparación con el tercer trimestre, y mantienen su objetivo de entregar 100.000 Model S y X.
Además, el grupo señala que espera margen bruto para el Model 3 en el cuarto trimestre, aunque señala que podría reducirse para los Model S y X por los aranceles para componentes de origen chino, un impacto que podría ser solo "parcialmente compensado" por una mayor eficiencia en los costes de fabricación. Para los tres modelos, Tesla prevé que los nuevos aranceles le supongan un impacto negativo en los resultados de unos 50 millones de dólares.