"En base a estas condiciones económicas desafiantes", Sony ha decidido aumentar el precio de su consola insignia, la PlayStation 5. Y lo ha ha hecho de manera inminente, menos en Japón, donde la subida de precio comenzarán el 15 de septiembre. En Europa se encarece 50 euros, mientras que EEUU es el único mercado que se salva.
"El entorno económico global es un desafío que muchos de ustedes en todo el mundo sin duda están experimentando". "Estamos viendo altas tasas de inflación global, así como tendencias monetarias adversas, que afectan a los consumidores y generan presión en muchas industrias", ha señalado la compañía en una publicación.
El aumento de precios de Sony se produce en medio de una caída de las ventas en las compañías de juegos, a medida que el auge inducido por la pandemia comienza a desvanecerse.
De hecho, las ventas en la unidad de juegos de Sony disminuyeron un 2 % interanual en el trimestre de junio, mientras que las ganancias operativas se desplomaron casi un 37%. El gigante japonés también recortó su pronóstico de ganancias para todo el año para su división de juegos.
Después de estos cambios, en Europa la PlayStation 5 pasará a costar 550 euros la versión física, mientras que la consola digital tendrá un precio de 450 euros.