MADRID, 23 (Portaltic/EP)
El cierre de los colegios en España por la situación actual de coronavirus ha provocado que los menores tengan un 180 por ciento más de actividad en línea, y las herramientas de control parental desde el router ofrecen una opción para que los padres, entre otras acciones, limiten desde apps en sus móviles el tiempo que pasan conectados a Internet los más jóvenes.
Internet Segura For Kids (IS4K), programa del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) orientado a menores, alerta del uso excesivo de las TIC por parte de niños y adolescentes, creando problemas de dependencia, descontrol y que esto "afecte negativamente a sus relaciones sociales, a su conducta y a su capacidad de gestión emocional".
Solo en la primera semana tras el cierre de los colegios en España en marzo, los menores españoles aumentaron un 180 por ciento el tiempo que pasan conectados a dispositivos con acceso a Internet como móviles, tabletas y ordenadores, según datos de Qustodio.
Aunque el acceso a Internet de los menores debe estar supervisado por un adulto, no siempre es posible controlarlo, y una solución para este problema es el uso de controles parentales a través del router, como el que ofrecen los routers de la gama EXO de D-Link.
Estos dispositivos son compatibles con una aplicación gratuita para Android e iOS, D-Link Defend, que los padres deben tener instalada en sus móviles. Está basada en la plataforma McAfee Secure Home, que permite a los padres establecer un control parental, incluido sobre el tiempo de conexión.
Con estas herramientas de control, desde la app y el router de casa es posible establecer horarios de conexión a Internet de los dispositivos de los niños, así como limitar las horas de conexión o programarlas e incluso bloquear su acceso. De esta manera se pueden seguir recomendaciones de expertos como la de no usar pantallas en las comidas o antes de acostarse.
Las herramientas de control parental desde el router aseguran también otras funciones, configurables desde la app D-Link Defend, como la de impedir la navegación en páginas web maliciosas o gestionar que los niños puedan acceder a la web pero no a redes sociales o apps de chat. También cuentan con funciones antivirus y de protección frente a amenazas.