El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha anunciado este viernes que ha desarrollado un prototipo de batería de flujo redox de vanadio de 10 kW de potencia y 20 kWh de energía para demostrar su viabilidad como sistema de almacenamiento de energía eléctrica limpia a gran escala.
Tal y como señala en un comunicado, este prototipo es fruto del trabajo de la Plataforma Temática Interdisciplinar PTI TrasnEner+, del CSIC, y supone una apuesta tecnológica para el almacenamiento estacionario de energía eléctrica a gran escala, con el objetivo de alcanzar una mayor integración de las energías renovables, superar sus problemas de intermitencia y acelerar la transición energética.
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Von der Leyen: España es "clave" para que la UE se libre de la dependencia del gas rusoEsta tecnología constituye el primer hito en el camino para obtener una batería de 50 kilovatios que permita extender su uso al sector industrial. El prototipo está formado por 4 'stacks' (apilamientos de celdas) similares a los que incorporará la batería de 50 kW. Los diversos componentes de la batería han sido desarrollados por equipos diferentes del CSIC. El diseño de todos los elementos que forman la batería, la tecnología de los sistemas de sellado y cierre, y los procesos de fabricación y montaje son obra del grupo de investigación del LIFTEC liderado por el investigador Félix Barreras.
El módulo incorpora, además, un sistema de gestión de la batería y la energía de desarrollo propio, basado en protocolos de operación compatibles con los estándares industriales, con el que se puede conocer el estado de la batería en todo momento.
La principal ventaja de las baterías de flujo redox de vanadio es la versatilidad que ofrecen: la potencia y la energía del sistema se pueden configurar de forma independiente mediante el aumento de la superficie activa de los electrodos, el número de celdas y el volumen de electrolito. Tienen, además, un ciclo de vida largo que puede superar los 20 años, lo que las convierte en excelentes candidatas para aplicaciones estacionarias y de uso intensivo, donde otras tecnologías como las baterías de litio no pueden competir, facilitando la penetración de las energías renovables en el mercado.
“Una de las grandes ventajas de las baterías de flujo redox es que pueden dimensionarse en potencia y capacidad para dar servicio en aplicaciones de almacenamiento tanto delante como detrás del contador; es decir, pueden conectarse directamente a plantas de generación conectadas a las redes de distribución o instalarse en los centros de consumo de energía o en su proximidad”, comenta Ricardo Santamaría, coordinador del proyecto.
De salir adelante el proyecto de una batería mayor, se daría un gran paso adelante ante uno de los principales problemas que tiene el sector de las energías renovables y que hasta ahora no habían tenido solución: el almacenamiento de la electricidad ante la inestabilidad de la producción.
Y es que gran parte de la electricidad limpia que se produce y que se está buscando expandir es solar y eólica, dos modelos que dependen de las condiciones climatológicas y no se pueden amoldar a las necesidades de la oferta planteadas cada día, como pasa con otras fuentes como el gas o la nuclear. De esta forma, mediante estas baterías, los días de mayor producción podrían almacenar la electricidad para utilizarla en los días que haya menos viento o sol.
Este descubrimiento puede ayudar a toda Europa a recortar su dependencia de los combustibles fósiles rusos. De hecho, en su última visita a España, Ursula Von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, ya anticipó que España tiene un papel clave en esa lucha.
"La guerra va a impactar en nuestra economía. Uno de los temas más candentes es el de la energía. La UE tiene que poder librarse de la dependencia del gas y carbón rusos, garantizar la eficiencia energética, invertir en renovables... para garantizar nuestra energía y la salud del planeta", dijo entonces.
Von der Leyen alabó a España por estar "liderando estos esfuerzos" y por el "papel preponderante de la energía renovable". Se refirió a la "pericia y experiencia enorme en el ámbito" del país en energías renovables, y aseguró que "España puede y debe desempeñar un papel importante en el abastecimiento de la UE". Además, señaló que "trabajar en las interconexiones es otra prioridad" a partir de ahora.