- El 85% de los dispositivos móviles usa Android, frente al 14,7% que usa iOS y el 0,1% que usa Windows Phone
- Incluso Joe Belfiore, vicepresidente corporativo de Microsoft, ha reconocido que desde hace tiempo usaba un teléfono Android
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Con menos del 0,1% de la cuota de mercado, Microsoft ha anunciado el cierre de su sistema operativo para dispositivos móviles, el denominado Windows Phone. La decisión de los de Redmond, aunque drástica, responde a una lógica empresarial que abre un amplio abanico de oportunidades a los tres gigantes de la tecnología, cada uno en un aspecto.
El 85% de los dispositivos móviles usa Android, frente al 14,7% que usa iOS y el 0,1% que usa Windows Phone
Hace ya años que la telefonía sufrió una revolución que cambió el sector para siempre. Incluso antes de que apareciera el iPhone en 2007, los primeros y primitivos smartphones ya marcaban la línea de lo que iba a ser el futuro. Tras un primer momento en el que cada fabricante diseñaba su propio sistema operativo, la llegada de Apple y su sistema iOS puso un nivel de sofisticación al que pocos podían llegar. Google lideró e hizo suyo el proyecto de Android y Microsoft adaptó su famoso Windows. Con los de Cupertino instalando su sistema operativo en exclusiva para sus dispositivos y con el gigante de los ordenadores lejos del nivel de sus competidores, Google y Android se convirtieron pronto en el gigante que son. El 85% de los dispositivos móviles usa ahora el sistema operativo de los de Mountain View, frente al 14,7% que usa iOS, según los datos de IDC a finales del primer trimestre de 2017.
Microsoft lo ha intentado de todas las formas posibles, se ha reinventado una y otra vez pero los fabricantes seguían cayendo en la red de Android. Incluso Joe Belfiore, vicepresidente corporativo de Microsoft, ha reconocido que desde hace tiempo usaba un teléfono Android, algo que también hizo Bill Gates, fundador y ex presidente de la compañía. La muerte de Windows Phone es la crónica de una muerte anunciada que a pesar de confirmar el duopolio en el sector que desde hace tiempo se venía vislumbrando abre una innumerable lista de oportunidades para tanto para Android-Google como para Apple e incluso para el propio Microsoft.
MICROSOFT SÓLO PUEDE MEJORAR
Los de Redmond se quitan un lastre con el que llevaban tiempo cargando. El cierre de Windows Phone permitirá a Microsoft centrarse en desarrollar sus aplicaciones y ponerlas a disposición de los usuarios allí donde están: Google Play y Apple Store. El trabajo de la compañía se centrará en que aplicaciones como OneDrive, Skype o Cortana sean accesibles en todas las plataformas y sigan mejorando la integración, la compatibilidad y el trabajo en paralelo con todos los dispositivos.
Programas como Office han abierto el camino que va a seguir Microsoft. La Suite más famosa de la compañía se ha desarrollado en los últimos tiempos de forma exponencial y los usuarios la pueden usar en un ordenador o en un smartphone, sea cual sea el sistema operativo de igual manera. Sin problemas de que unas funcionalidades sólo estén disponibles según el dispositivo o que la interfaz varíe tanto en función del sistema operativo que parezcan productos diferentes.
EL IPHONE SERÁ MÁS COMPATIBLE
Al igual que con los ordenadores, el sistema operativo de Apple no domina en el mercado de los smartphones. Muchos usuarios de iPhone no usan Mac y aunque los de Cupertino se afanen en buscar herramientas compatibles, sus dispositivos siguen siendo más amigables con sus ordenadores que con los Windows.
La nueva era de los de Redmond abrirá puertas a que los ordenadores con su sistema operativo sean más compatibles a los iPhone e iPad. El gran beneficiado de esto es Apple. Los de Cupertino tienen conquistada la cima de la alta gama tanto en dispositivos móviles como en ordenadores. El apoyo de Microsoft seguirá impulsando aplicaciones como Office o Skype en los dispositivos de Apple haciéndoles más valiosos y deseables para el gran público gracias a hacerlos más compatibles.
ANDROID AUMENTA SU REINADO
Aunque no será inmediato, y no se trate de una cifra desorbitante, Android está llamado a heredar los usuarios de Windows Phone. El sistema operativo para dispositivos móviles impulsado por Google se ha ganado su posición a golpe de acuerdos con los fabricantes, mucho trabajo con los desarrolladores y unas prestaciones que nada tienen que envidiar a sus rivales.
Uno de los últimos, y más ambiciosos, proyectos de Microsoft para Android pasa por permitir a los usuarios continuar su trabajo en el ordenador desde su smartphone, la compatibilidad entre dispositivos, al igual que en el caso de Apple, pasa por ser una de las claves.
El papel de los de Redmond tanto en Cupertino como en Mountain View pasa por ser útiles para los usuarios, convertirse en el ‘genérico’ que tanto los usuarios de uno u otro lado puedan utilizar en su móvil o en su ordenador. Microsoft está llamado a ser el ‘intermediario’, ahora que la política ha puesto tan de moda este término, entre Apple y Google colonizando todos los dispositivos con sus aplicaciones y no con su propio sistema operativo como han intentado hasta ahora.