Feministas defienden que Rosell es "una buena elección" y destacan su "reconocida trayectoria" en materia de igualdad
MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
La Asociación de Mujeres Juezas de España ha celebrado el nombramiento de la magistrada en excedencia Victoria Rosell como nueva delegada del Gobierno para la Violencia de Género del Ejecutivo de coalición de PSOE y Unidas Podemos.
"Estoy segura de que los derechos humanos y el feminismo van a estar bien salvaguardados con ella", ha señalado en declaraciones a Europa Press Lucía Avilés, magistrada y portavoz de esta asociación, de la que es miembro la propia Rosell.
Rosell era titular del Juzgado de Instrucción número 8 de Las Palmas de Gran Canaria y actualmente está en excedencia. Se define como feminista y es defensora de la perspectiva de género en las resoluciones judiciales.
La Delegación del Gobierno para la Violencia de Género es un organismo dependiendo del Ministerio de Igualdad, del que está a cargo la 'numero dos' del partido morado, Irene Montero. Precisamente los principales retos en esta materia están muy vinculados con la administración de Justicia: la reforma de los delitos sexuales en el Código Penal y el desarrollo del Pacto de Estado contra la Violencia de Género, que incluye muchas medidas que afectan al ámbito judicial.
"Para la asociación es una enorme alegría. Nos ponemos a disposición de la Delegación para seguir avanzando en la lucha contra la violencia de género", ha manifestado Avilés tras conocer el nuevo nombramiento. Según ha destacado, Rosell tiene una trayectoria "brillante" y "demostrada formación en perspectiva de género".
En este sentido, Avilés sostiene que la elección de Rosell para este puesto "tiene carga simbólica" porque "visualiza el cambio feminista" de los últimos tiempos, muy enfocado a la denuncia de la 'justicia patriarcal'.
A su juicio, la Justicia es "uno de los eslabones más importantes en la lucha contra la violencia de género, aunque no el único". Para Avilés, "lo primero" que se debe hacer es "exprimir todas las herramientas jurídicas" para adaptar el ordenamiento jurídico a lo que establece el Convenio de Estambul y ampliar el concepto de violencia de género a todas las violencias contra la mujer, no solo la que tiene lugar en el ámbito sentimental.
Asimismo, ha reclamado "medios" para defender la vida de las mujeres. "También hay que tener presente que el feminismo y la igualdad es una cuestión de Estado y no depende de quien esté al frente", ha apuntado.
"UNA BUENA ELECCIÓN"
Por su parte, la presidenta de la Federación de Mujeres Progresistas, Yolanda Besteiro, ha dicho que Rosell "es una buena elección" para desempañar este cargo porque es tiene una "reconocida trayectoria" en la lucha por la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres y por introducir la perspectiva de género en la justicia.
"Tiene conocimientos especialmente jurídicos que van a ser importantes para retomar el desarrollo del Pacto de Estado que ha quedado pendiente", ha remarcado a Europa Press. Besteiro también ha saludado el nombramiento de Irene Montero como ministra de Igualdad quien, a su juicio, es "una buena carta de presentación" en esta materia.
En declaraciones a Europa Press, la presidenta de la Federación de Asociaciones de Mujeres Separadas y Divorciadas, Ana María Pérez del Campo, se ha mostrado "contenta, esperanzada y deseosa" del nuevo Gobierno, al tiempo que ha expresado que "no le preocupa" que Unidas Podemos asuma este departamento. "Supongo que Podemos va hacer lo que ha hecho el PSOE", ha dicho.
"Sea la persona que sea, será la persona a la que nos dirijamos para hacer un trabajo conjunto. Si hay algo difícil y complicado es suprimir la desigualdad entre hombres y mujeres", ha señalado. A su juicio, es "bueno" que Igualdad esté en un Ministerio en exclusiva porque eso quiere decir que estas políticas "cobran un interés político".
Montero será la ministra de Igualdad y sustituirá al frente de esta cartera a la socialista Carmen Calvo, que hasta ahora la compaginaba con la Vicepresidencia del Ejecutivo.
Por su parte, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha recordado a la nueva ministra Irene Montero que tiene la oportunidad de dar un nuevo impulso a las políticas de igualdad ante "la ruptura del consenso en el debate político que afecta tanto a la definición en sí misma de la violencia de género, como a su origen o a las herramientas para combatirla".
"Abogamos por no cuestionar ni relativizar esta lacra y confiamos en que el nuevo Gobierno desarrolle medidas valientes para estrechar el cerco sobre los maltratadores, también en el ámbito laboral", han afirmado desde el sindicato.