MADRID, 21 (CHANCE)
Anoche tuvo lugar la gala especial de Operación Triunfo en la que se elegía la canción que representaría a España en Eurovision el próximo 18 de mayo en Tel Aviv, Israel. Nueve triunfitos defendieron los distintos temas, pero una canción destacó sobre el resto y consiguió levantar al público durante la actuación.
Se trata de La Venda, single que compuso Adriá Salas, integrante de La Pegatina, para Miki Núñez. El joven, quien quedó en sexta posición en OT 2018, se ha convertido en el candidato a Eurovision de nuestro país con un 34% tras imponerse a María Villar con su Muérdeme o No Puedo Más de Famous.
Detrás de Núñez quedó la joven madrileña con un 22% y el tercer puesto fue para Nadie Se Salva, el dúo protagonizado por Natalia y Miki de nuevo obteniendo el 14% de los votos. Un alivio para las dos exconcursantes, pues durante los días previos a la gala animaron a los seguidores del programa a votar por La Venda y no por sus propuestas.
Una de las claves de la canción de Salas es que el tema es muy del estilo del de Terassa. Con esa rumba catalana, fiesta, ritmo pegadizo y ska, Miki se movíó en el escenario como pez en el agua. Y es que no es la primera vez que toca estos palos, pues antes de su paso por el talent el cantante era integrante de Dalton Bang, grupo de versiones de su ciudad. Además, durante el concurso destacó por estrenar la lengua catalana en el espacio con su versión de Una Lluna a L'Aigua de la formación Txarango.
La letra de La Venda, tal y como comentó su autor en una entrevista exclusiva a RTVE, habla de dejar los prejuicios a un lado y sobre el propio crecimiento personal: "A medida que pasan las estrofas nos vamos liberando de la presión social, de ese momento en el que uno está muy encerrado y va haciendo lo que la corriente le dicta. Ahí es donde empieza la canción. Poco a poco se nos cae esa venda que hace que sigamos la corriente, lo preestablecido".
El joven recoge el testigo que dejaron la edición pasada Amaia Romero y Alfred García con Tu Canción. De hecho el propio joven se encontraba en el plató de OT para recordar alguno de los momentos más remarcables durante su paso por el festival: "Fue precioso. Esos segundos antes de que empezara la canción, en los que nos miramos... Sólo por eso mereció la pena. Fue una situación tan mágica".