Este viernes comienza el verano y será "al menos" 0,5 grados centígrados más caluroso de lo normal en la Península y Baleares, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), pero no ve una señal clara de precipitaciones para el periodo junio-septiembre.
La predicción de la AEMET prevé que la temperatura para este verano sea similar a la del 2018, que resultó 0,6ºC más cálida respecto a los valores normales del periodo de referencia 1981-2010 pero menos caluroso que los estíos de 2015 a 2017.
La portavoz de la AEMET, Beatriz Hervella, ha destacado que la anomalía de medio grado centígrado más para el conjunto de España podría ser incluso mayor en León, Orense, Zamora, oeste de Extremadura, Huelva, Málaga y sur de Castilla-La Mancha donde la predicción prevé un verano hasta 1ºC más cálido.
Así, Hervella ha comparado esta predicción con el "famoso verano de 2003" fue 1,9ºC superior a los niveles normales.
Además, el portavoz Rubén del Campo ha confirmado que la primavera que termina fue también cálida, pero sobre todo ha subrayado que ha sido la sexta más seca del siglo XXI, con un 15% menos de lluvias de lo normal entre marzo y mayo, y que sitúa a España en "sequía meteorológica".
"La escasez de precipitaciones en los últimos 12 meses permite hablar de sequía meteorológica, sobre todo en la mitad occidental y en el tercio norte, así como en algunas islas canarias", ha destacado.
SÁBADO, EL DÍA MÁS CALUROSO DEL AÑO
Según la previsión meteorológica, España está sufriendo una potente borrasca, denominada Julia, que va a ayudar a bombear el aire cálido, lo que hará que las temperaturas empiecen a subir para el fin de semana.
"Podríamos tener el fin de semana más caluroso desde que hay registros, o, al menos, aproximarse al año de 1960 en el que hizo mucho calor", alertan fuentes meteorológicas.
Pese a que va a ser un fin de semana cálido, en concreto, el sábado podría ser el día más caluroso del año.