MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
La Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos estima una pérdida en la cosecha de cereales de 1.500 millones de euros debido a la sequía que se está dando en todo el territorio español.
Esta situación es muy similar a la del año 2017, en el que se cosecharon 7,6 millones toneladas menos que en 2018. Si se toma como referencia el año pasado, la organización pone en evidencia que se van a perder alrededor de 9 millones de toneladas de la cosecha de cereal de secano por la falta de lluvia, que supone el 46% de pérdida.
La organización alerta de que en un trienio (2017-2019) ya se han dado dos años de sequía, por lo que la Administración debería tomar medidas que ayuden a paliar la situación por la que atraviesan los agricultores, así como los ganaderos de extensivo, perjudicados también por la falta de pastos y el consiguiente aumento del precio de los piensos y forrajes.
Una de las regiones más castigadas es Castilla y León, que ha visto reducirse su cosecha de cereales de secano en casi un 60% respecto al 2018, según la estimación de Unión de Uniones, con las consiguientes pérdidas económicas que suponen para el territorio.
Por su parte, también Extremadura, Valencia, Cataluña, Madrid y Andalucía han visto mermada su producción por la falta de lluvias, con una reducción entre el 56% y el 52%, mientras que en Castilla-La Mancha se registran pérdidas de producción de 1,5 millones de toneladas, lo que supone alrededor de un 38%.
Alguna de las soluciones que propone Unión de Uniones es mayor flexibilidad en el cumplimiento de los compromisos del pago verde de la PAC, al darse situaciones en las que el segundo o tercer cultivo sembrado no ha nacido de forma adecuada ante la falta de lluvias, así como dar cumplimiento al requisito de la diversificación de cultivos, como ha sucedido con el cultivo del girasol.
También pide que se establezca una compensación parcial de la pérdida a través de ayuda de mínimos a agricultores y ganaderos afectados incrementando el tope máximo por explotación hasta los 25.000 euros.
Según la organización, se están incumplimiento las medidas aprobadas en la Ley 1/2018 contra la sequía, que, entre otras cuestiones, preveía un fondo extraordinario de ayudas de 1.000 millones de euros y otras actuaciones como el contrato eléctrico de regadío con dos potencias diferentes a lo largo del año.
Unión de Uniones se ha dirigido al Ministerio de Agricultura para conocer si se van a poner sobre la mesa "soluciones reales" y ha indicado que no están dispuestos a "consentir en silencio a que se repita lo que pasó con la sequía del 2017".