BILBAO, 6 (EUROPA PRESS)
La defensa de Pablo Ibar, ciudadano hispanoamericano y sobrino del conocido boxeador vasco José Manuel Ibar Azpiazu, "Urtain", ha presentado una moción ante el Tribunal de Broward County como primer paso para el recurso de solicitud de repetición del juicio por el triple asesinato el 27 de junio de 1994 en Miramar (Florida) de Casimir Sucharski, propietario de un club nocturno, y las bailarinas Sharon Anderson y Marie Rogers.
Se trata de un paso previo a la notificación de planteamiento del recurso al Tribunal de Apelaciones del Cuarto Distrito de Florida, aunque los propios letrados, en base a los precedentes, admiten que es muy poco probable que prospere, según ha informado la Asociación contra la Pena de Muerte Pablo Ibar.
El pasado 22 de mayo, Ibar logró esquivar la condena a muerte al no conseguir el jurado popular la unanimidad necesaria. Finalmente, fue condenado a cadena perpetua tras ser declarado culpable el 19 del pasado mes de enero.
Ibar, de 47 años de edad, ha pasado 25 años en prisión, 16 de ellos en el 'corredor de la muerte', en la cárcel de Raifrod. Este mismo miércoles, día 5, ha sido trasladado a un centro penitenciario de evaluación de Miami, donde permanecerá aproximadamente un mes hasta que se tome la decisión de a qué prisión es enviado.
Durante su estancia en este centro permanecerá incomunicado y sólo le podrá visitar el cónsul general de España en Miami, Cándido Creis. Una vez destinado en la nueva prisión, la familia podrá visitarle de nuevo y coincidir con él en un mismo espacio físico.
En 2016 la Corte Suprema de Florida anuló la sentencia de pena de muerte y ordenó repetir el juicio, al determinar que había tenido "una defensa ineficaz" y había sido condenado a partir de pruebas "débiles e escasas".
Ibar fue detenido el 14 de julio de 1994 en Miami Dade por allanamiento de morada y robo, delitos por los que fue condenado a ocho años de cárcel. El 8 de agosto de ese año fue acusado del triple crimen cometido en Miramar, pese a que éste siempre defendió su inocencia y aseguró que esa noche había estado con su novia, Tanya Quiñones, con la que posteriormente se casó.
El primer juicio fue declarado nulo por falta de acuerdo del jurado, el segundo aplazado, pero en el año 2000 se le consideró culpable y fue condenado a muerte. Tras los recursos de la defensa, en 2016 el Tribunal Supremo de Florida anuló la condena a pena capital y ordenó repetir la vista oral.