Horacio Renna, CEO de Proactiv, nos desvela las claves del éxito de 'Miraculous, el espectáculo de Ladybug'

Renna, con espectáculos tan grandes a la espalda como Disney On Ice, Star Wars in Concert, Marvel Universe Live o Peppa Pig, nos confiesa cómo es empezar una producción tan exigente como 'Miraculous, el espectáculo de Ladybug'. Desde la búsqueda del público, hasta la venta de entradas y terminando con los planes de futuro de la producción. ¡Sigue leyendo para conocer todos los detalles sobre la clave del éxito de Ladybug!

CH: ¿Cómo se lleva haber creado un espectáculo nuevo que va a crear tendencia a nivel mundial?

Horacio Renna: En definitiva ese es el objetivo de Proactiv. Como sabéis llevamos un montón de años en esto, dedicados al espectáculo familiar y se nos ocurrió la idea, cuando se dio el triunfo de esta serie, de exportar algo a nivel nacional con calidad internacional. Y el primer obstáculo que te encuentras es hacer una producción de nivel medio, que ya cuesta un dinero que a priori muy pocos productores se atreven a invertir. Pero bueno, estamos apostando, tenemos talento nacional muy preparado y un elenco del que estamos muy orgullosos y vamos a presentar en Madrid un espectáculo buenísimo.

CH: Se agradece la cantidad de nuevos espectáculos que están apareciendo en Madrid, que además le da prestigio no solo a la ciudad, sino también a las obras que se estrenan.

HR: Sin duda, estrenar en Madrid es una decisión estratégica. Madrid, desde que se ha posicionado como la tercera capital del mundo de los musicales, es un gran punto de partida para empezar y te da credenciales. La oferta es súper variada y nosotros estamos ocupando un nicho donde el espectáculo familiar es muy trasversal, porque la historia de Ladybug gusta desde niños a adolescentes y los padres van a verlo también. El público de los espectáculos familiares es un 40% de jóvenes y un 60% de adultos, por lo que buscamos conseguir que los adultos también salgan satisfechos del espectáculo.

CH: En un momento de incertidumbre política donde hay muchas familias que se planean empezar a guardar el dinero y dejar de consumir entretenimiento, ¿cómo afecta esto a producciones como Ladybug?

HR: Aquí, el público es muy maduro, los que no son tan maduros son los políticos. Estamos en un mal momento, no obstante, creo que en Madrid la gente tiene unos hábitos y en este periodo de fiestas se sale y se busca espectáculo. Luego va en función del poder adquisitivo de cada uno y es cierto que puede haber algo de temor, pero por la información que tenemos nuestras ventas están yendo muy bien y sin haberse estrenado el espectáculo ya llevamos vendido el 60% de las entradas. Literalmente, es un éxito para la campaña tan justa que hemos hecho. En definitiva, creo que hemos conectado con la gente.

CH: Por lo que cuentas, no solo buscáis atraer a niños con este espectáculo, sino llamar la atención de adolescentes también.

HR: En este caso, creo que Ladybug va a convocar a adolescentes y van a venir solos, sin padres, porque la historia pertenece a esa edad y es una historia de amor, que es lo que nos mueve a todos. Oyendo la música, viendo la escenografía, las coreografías... creo que va a convocar a esa franja de público. Es otra mirada hacia la serie, más trasversal. Y nosotros tenemos cierta ansiedad sobre eso, por saber cómo se va a dividir del público. Pero la historia también tiene su parte vocacional y está escrita para eso, para llegar a franjas mayores de la media de un espectáculo de niños pequeños.

CH: ¿Por qué destaca Ladybug entre otras muchas series animadas?

HR: Digamos que es como la vida misma. Es extrapolar una parte de la sociedad, sacando la parte de los superhéroes. Y tiene su toque de romanticismo, que con tanto materialismo y electrónica y era digital me parece increíble que todavía se mantengan este tipo de historias.

CH: ¿Y tú por qué escogiste Ladybug? ¿Qué te gusta de esta serie?

HR: Me gustó que la historia transcurriese en la edad de los adolescentes. Estamos intentando salir de los shows que vienen para niños más pequeños y esta es una historia que tiene un punto más de madurez. Y eso nos gustó. Y , sinceramente, el entorno donde transcurre la historia es verosímil. Y es ahí donde se plantea nuestro gran reto, sacar los personajes de la animación y llevarlos al escenario de tal forma que sean creíbles. Porque me da igual la edad, ya que los niños y adolescentes son el gran jurado y nos juzgan de forma implacable. El reto es sacar esa historia que nos gustó y tuvo tanto éxito en todo el mundo.

CH: Ladybug ya lleva cuatro temporadas, ¿no pensasteis en sacarlo antes?

HR: Queríamos hacerlo antes, pero realmente la producción fue compleja y no es fácil buscar actores, músicos, bailarines, guionistas... Pero bueno, no es tarde. La serie entra ahora en una cuarta temporada y se va a hacer una película. Lo que significa que la serie ha triunfado.

CH: ¿Qué es lo que más va a emocionar y qué lo que más os ha costado hacer?

HR: La música es lo que más va a emocionar y está creada especialmente por el autor de la obra, que además es músico, y lo ha creado con la sensibilidad de que él es el padre de los personajes. Técnicamente siempre hay desafíos, como los vuelos, las peleas, los detalles de escenografía más espectaculares... que te obligan a tener que buscar la excelencia de modos más peculiares y complicados.

CH: ¿Planes de futuro para este espectáculo?

HR: Tenemos previsto después de Reyes ir a Barcelona, Valencia... pero si todo sale bien, tenemos solicitudes desde México, Perú, Francia, Brasil, Italia... Este mundo en el fondo no es muy grande, solo cambia el idioma, y rápido contactamos unos con otros y eso se sabe, por suerte. Entonces, viendo la reacción final de Madrid, consideraremos incluso en hacer dos compañías de Ladybug.