ROMA, 11 (EUROPA PRESS)
El prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, el cardenal Peter Turkson, ha enviado un mensaje ante la crisis sanitaria por coronavirus en el que alerta del peligro de estigmatizar a los contagiados de coronavirus.
"La enfermedad no conoce color de piel", ha señalado el cardenal africano en un mensaje en el que también ha pedido oraciones para ayudar "a los enfermos en la sanación y para que sostenga a los trabajadores de la salud en su misión".
Turkson ha invitado a los cristianos a esforzarse "por evitar la estigmatización de los afectados", ya que "la enfermedad no conoce límites ni color de piel" cuando en cambio "habla el mismo idioma".
"Estamos viviendo días de gran preocupación y creciente inquietud, días en los que la fragilidad humana y la vulnerabilidad de la supuesta seguridad en la técnica se ven socavadas", ha constatado el prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral en su mensaje con motivo de la epidemia causada por el coronavirus.
Por este motivo, Turkson ha subrayado en su mensaje que el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral "desea unirse a la voz del Santo Padre, renovando así la cercanía de la Iglesia, en la animación de la pastoral de la salud, a todos los que sufren a causa del contagio de COVID-19, a las víctimas y sus familias, así como a todos los trabajadores de la salud, comprometidos en primera línea, que ponen toda su energía en la atención y el alivio de los afectados".
Así, ha expresado su apoyo a los países más afectados por el contagio: "Nos unimos, recordándolos en nuestras oraciones, a la labor de las autoridades civiles, los voluntarios y los que se han comprometido a detener el contagio y a evitar el riesgo para la salud pública y el creciente temor que esta epidemia desenfrenada está generando".
Del mismo modo, desde el Dicasterio han querido alentar "a las estructuras y organizaciones sanitarias laicas y católicas, nacionales e internacionales", a que continúen ofreciendo sinérgicamente "la asistencia necesaria a las personas y poblaciones, así como a que pongan en práctica todos los esfuerzos indispensables para encontrar una solución a la nueva epidemia".
Asimismo, Turkson ha señalado que "tanto el Santo Padre como varios jefes de Estado se han mostrado solidarios con los países más afectados, "donando productos médicos y sanitarios y ayuda financiera". Por ello, se ha mostrado esperanzado de que "todos puedan continuar esta labor de apoyo, porque ante una emergencia de este tipo muchas naciones, especialmente las que tienen sistemas de salud débiles, se verán abrumadas por los efectos del virus y no podrán hacer frente a las demandas de atención y proximidad a sus naciones".
Para el purpurado africano esta crisis ha de convertirse en un momento para "fortalecer la solidaridad y la cercanía entre los Estados", así como "la amistad entre los personas". "Es el momento de promover la solidaridad internacional para compartir instrumentos y recursos", ha recalcado mientras que se ha mostrado preocupado porque la incidencia del virus ha evidenciado "aún más las graves desigualdades que caracterizan a nuestros sistemas socioeconómicos".
"Para cada persona, creyente o no creyente es un tiempo propicio para comprender el valor de la fraternidad, de estar unidos unos a otros de manera indisoluble", ha concluido.