El Orione de la Marina Militare italiana ha empezado a entrar al puerto de Valencia antes de las 13.00 horas de este domingo, y completa así la acogida de los tres barcos de la flota del Aquarius. En el último, el segundo más numeroso, con 250 personas: 228 hombres y 22 menores no acompañados --ninguna mujer--. De ellos, 17 presentaban problemas leves de salud los últimos días.
La embarcación ha iniciado su entrada en la bocana del muelle 1 del puerto sobre las 13.00, dos horas después de que lo hiciera el Aquarius de la ONG SOS Mediterráneo, y hasta seis más tarde del también italiano Dattilo, de la Guardia Costera. Ha llegado con una hora de retraso desde su llegada inicialmente prevista a las 12 del mediodía, aunque con un intervalo de tiempo menor que su predecesor.
Culmina así la acogida en España de los 629 personas de 26 nacionalidades rescatadas en costas de Libia que se negaron a recibir los gobiernos de Malta e Italia, tras una travesía de ocho días por el Mediterráneo.
El dispositivo de recepción ha arrancado a primera hora de este domingo, con la llegada del Dattilo a las 6.50 horas. Cuatro horas después, sobre las 10.45, ha finalizado el desembargo de las 274 personas que llevaba a bordo. Se trataba del navío más numeroso de los tres; en él iban 182 hombres, 32 mujeres y 60 menores no acompañados (ocho chicas y 52 chicos).
Un joven de 29 años de Sudán del Sur ha sido el primer inmigrante en completar todo el proceso de identificación y examen por parte de los policías y sanitarios desplegados en el puerto de Valencia.
El segundo, el Aquarius que da nombre a la flota, ha hecho su entrada en la bocana del muelle 1 sobre las diez y media, con un total de 106 inmigrantes a bordo: 51 hombres, 45 mujeres, nueve chicos y ocho chicas. En esta embarcación, la menos numerosa de las tres, viajaban seis embarazadas y los diez menores acompañados, así como la mayoría de las personas (56) con problemas leves de salud -no había ninguno grave--.
Su llegada se ha producido con dos horas de retraso respecto a la previsión de que arribara a las nueve de la mañana, debido a que los sanitarios se han encontrado con más patologías leves de lo esperado entre los ocupantes del primer barco, el Dattilo, la mayoría por quemaduras, malestares y escoriaciones en la piel.