BARCELONA, 3 (EUROPA PRESS)
Un estudio dirigido por investigadores del Institut Català de Paleontologia Miquel Crusafont (ICP) revela que la morfología del laberinto óseo del oído interno es una herramienta para reconstruir las relaciones filogenéticas entre los simios y los humanos.
Mediante una técnica de análisis morfométrico geométrico 3D, los investigadores han cuantificado la 'señal filogenética', el grado en que las similitudes morfológicas reflejan las relaciones de parentesco, que encierra esta estructura anatómica en los antropoideos actuales --monos, simios y humanos-- y han analizado la morfología del hominoideo extinto 'Oreopithecus' y del hominino fósil 'Australopithecus'.
Para abordar el pasado más remoto, la proximidad entre dos determinadas especies solo se puede inferir a partir del estudio de datos morfológicos, obtenidos de los fósiles, y aunque los algoritmos informáticos contribuyen a determinar el curso más probable, no es tarea sencilla debido a la gran cantidad de características que han evolucionado independientemente.
Sin embargo, algunas partes anatómicas parecen ser menos propensas a haber evolucionado de forma independiente, entre ellas, el laberinto óseo del óido interno, ubicado en el hueso temporal, un elemento bastante común en el registro fósil debido a su alta mineralización.
Debido a sus relaciones con el equilibrio y la audición, los componentes del laberinto se habían investigado hasta ahora principalmente para realizar inferencias funcionales en simios y humanos, especialmente sobre su sistema de locomoción, y han sido muy informativos para analizar la historia evolutiva de distintos mamíferos.
El equipo de investigación del ICP dirigido por Alessandro Urciuoli y David Alba ha cuantificado la 'señal filogenética' del aparato vestibular de antropoideos actuales con el 'Oreopithecus' y el 'Australopithecus'.
Según Urciuoli, esta aproximación se había demostrado efectiva para analizar la posición filogenética de homininos y otros mamíferos, y se preguntaron si también se podría aplicar a otros primates fósiles.
TÉCNICA 3D
Los investigadores, en un artículo publicado en 'eLife', se han basado en una técnica desarrollada recientemente de análisis 3D de morfometría genética y los resultados apoyar la hipótesis de que el 'Oreopithecus' fue un representante basal que sobrevivió más allá del resto de miembros de su grupo y que convergió en algunos aspectos con los grandes simios actuales.
También son consistentes con la posición ya conocida del 'Australopithecus' como representante temporano del linaje humano: "Nuestro trabajo confirma el potencial de la morfología del oído interno y, en particular, de los canales semicirculares, para afinar en las relaciones filogenéticas de los simios del Mioceno, que todavía son muy controvertidas", ha afirmado Alba.
"Hemos generado una hipótesis comprobable sobre la evolución del oído interno en los simios y los seres humanos que en el futuro deberá ser sometida a un examen más detallado basada en el análisis de otros fósiles, en particular los grandes simios del Mioceno", ha subrayado Urciuoli.
Ha señalado que "desenmarañar las relaciones de parentesco entre la panoplia de simios del Mioceno conocidos es esencial" para mejorar la comprensión de la evolución de los homínidos.