ROMA, 22 (EUROPA PRESS)

El Gran Rabinato de Israel y la Comisión de la Santa Sede para las Relaciones Religiosas con el Judaísmo han asegurado que tienen una "obligación especial" con los miembros más vulnerables de sus comunidades y, en particular, con los niños, "garantes de la posteridad, que todavía no pueden expresar su pleno potencial y defenderse solos".

Así lo señalan en una declaración conjunta fruto de la reunión que ha mantenido entre el 18 y el 20 de noviembre en Roma. La Comisión bilateral dedicó sus deliberaciones al tema de la dignidad humana, con especial referencia a los niños, por el Día Universal del Niño.

La Comisión apreció el "progreso significativo" en la sociedad moderna en relación a los derechos humanos, tal como se evidencia en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y, en particular, en la Convención de 1989 sobre los Derechos del Niño.

Ambas delegaciones coincidieron en la necesidad de expresar el respeto por la dignidad personal de los niños con la oferta de "una amplia gama de estímulos e instrumentos para desarrollar sus capacidades de reflexión y de acción".

"Es necesario fomentar relaciones de amor auténtico y estable, y proporcionar la nutrición, atención médica y protección adecuadas, así como la educación religiosa y escolarización necesarias, el aprendizaje informal y el cultivo de la creatividad", subrayan en el texto.

Ambas partes consideran que la sociedad en su conjunto, pero "en particular los padres, los maestros y guías religiosos", tienen "una responsabilidad especial en el crecimiento moral y espiritual de los niños" y han destacado "la tensión entre el esfuerzo por garantizar la máxima libertad de elección y el de asegurar la protección y la orientación prudente".

Los miembros de la Comisión Bilateral fueron recibidos en una audiencia privada por el Papa Francisco que afirmó su compromiso personal en este ámbito y en el progreso de las relaciones entre católicos y judíos.

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