La Policía dice que el regreso ha sido "gracias" a sus gestiones, mientras que las familias niegan haber recibido ayuda del Gobierno
MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
Siete familias de españoles con bebés por gestación subrogada pudieron regresar desde Kiev (Ucrania) a España el pasado lunes. Hasta ese día, permanecían "atrapadas" en la capital ucraniana sin poder volver a sus casas junto a los recién nacidos ante la pandemia del COVID-19.
Según ha asegurado el director logístico y comisario principal de la Policía Nacional, José García Molina, el regreso se ha producido "gracias a las gestiones de asistencia e interlocución de los agentes en el extranjero".
Así lo ha manifestado en la rueda de prensa que diariamente se ofrece en Moncloa con motivo de la pandemia del coronavirus COVID-19"Aunque pasen los días, no cesan las labores de repatriación de los ciudadanos españoles que aún siguen en el extranjero. Es el caso de siete familias que, con las fronteras y los aeropuertos cerrados, permanecían atrapadas en Kiev (Ucrania) con sus bebés recién nacidos", ha dicho, antes de anunciar que su regreso se produjo el pasado lunes.
Sin embargo, estas familias niegan que el Gobierno les haya ayudado a regresar y aseguran que tuvieron que "buscarse la vida" para poder volver a España. Según relata una de ellas, vivieron "momentos de tensión en el control de fronteras tanto en Kiev como en Frankfurt (Alemania), antes de subir en el avión que les llevó a Madrid.
AYUDA DEL CÓNSUL ESPAÑOL EN FRANKFURT
"Ayuda o repatriación, ninguna", asegura a Europa Press la miembro de la Asociación de familias Por Gestación Subrogada en Georgia y Ucrania (Apingu), Ilanit Snir Piñero. Según explica, "la única ayuda" que han tenido estas familias ha sido la del cónsul español en Frankfurt, con quien contactaron a través de la Generalitat de Cataluña, de donde eran varias de las familias que han podido regresar.
Desde Apingu llevan semanas denunciando que hay una veintena de familias de españoles con bebés recién nacidos por gestación subrogada "atrapadas" en Kiev sin poder regresar a sus casas junto a los menores. Acusan al Ministerio de Exteriores de "abandonarles" al negarles la posibilidad de expedir pasaportes ni salvoconductos a los menores para poder viajar a España junto a ellos.
Desde el Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación argumentaban que no se puede dar pasaportes ni salvoconductos a los bebés nacidos por gestación subrogada en Ucrania. El departamento se ampara en la instrucción de febrero de 2019 que impide la inscripción de estos niños en el registro civil del consulado de este país.
El bloqueo a la inscripción de los niños hace que las familias deban solicitar la ciudadanía y pasaporte extranjeros para que sus hijos puedan salir del país y viajar a España. Pero, ante la crisis del COVID-19, las oficinas de extranjería están cerradas, por lo que estas familias han pedido "auxilio" a la embajada y que se expida salvoconducto a los niños para que puedan viajar.
Tal y como precisa Ilanit, las familias que ya han podido regresar a España ya llevaban dos o tres meses allí y, antes de que estallase la crisis del COVID-19, comenzaron con los trámites. "Tenían ese trámite adelantado y no les pilló de lleno el cierre, como sí ha ocurrido con muchas familias que siguen allí", sostiene.
Las familias que volvieron el lunes, tal y como expone, solamente estaban a la espera de que se les expidiera el pasaporte ucraniano porque la ciudadanía del bebé ya la tenían. Ya con el pasaporte en la mano, estas siete familias acudieron a la Embajada española en Kiev para preguntar cómo podían salir de allí, teniendo en cuenta que con el cierre de fronteras por la crisis sanitaria no hay apenas vuelos operando.
"La embajada española no les prestó auxilio alguno; es más, se enteraron de la disponibilidad del vuelo que finalmente cogieron desde Kiev a Frankfurt porque escribieron a prácticamente todas las embajadas de otros países en Ucrania solicitando información de vuelos, y de hecho les informó de este vuelo otra embajada", asevera Ilanit, lamentando que "ni siquiera" se les diese información al respecto.
Tampoco les respondieron desde la Embajada a la consulta acerca de que si se enfrentaban a "problemas" en la frontera al ir a Frankfurt, ya que los bebés solo tienen pasaporte ucraniano y, por tanto un pasaporte no comunitario, según remarca Ilanit en declaraciones a Europa Press.
"Lo que hicieron las siete familias fue arriesgarse, literalmente, a comprar el vuelo de Kiev a Frankfurt, y luego el enlace a España; y vía la Generalitat de Cataluña se pusieron en contacto con el cónsul español en Frankfurt, y él les contestó de inmediato al correo electrónico y les dijo que en cuanto llegaran a Alemania él les estaría esperando", añade.
Según apostilla Ilanit, eso es lo que hizo el cónsul, quien acompañó por todo el aeropuerto y cruce de fronteras a estas familias. "Gracias a eso pudieron coger el vuelo hacia España; no gracias a la Embajada española, al Gobierno español, ni repatriaciones de ningún tipo", concluye.