Survival International celebra esta "gran victoria" porque era como "poner al zorro al frente del gallinero"
MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
Un tribunal regional de Brasil ha suspendido el nombramiento del misionero evangélico Ricardo Lopes como jefe de la oficina para pueblos indígenas no contactados de la Fundación Nacional del Indio (FUNAI), por considerar que con él al frente de la misma hay peligro de que se contacte con estas comunidad nativas.
El Tribunal Regional Federal de la Primera Región (TRF-1) ha acogido así la petición del Ministerio Público Federal (MPF) de Brasilia para dejar temporalmente sin validez la designación de Lopes, realizada el pasado mes de febrero por el presidente del país, Jair Bolsonaro.
EL MPF capitalino aportó como fundamento de su demanda documentos de movimientos misioneros a los que Lopes está vinculado, como la Misión de las Nuevas Tribus de Brasil, de la que fue miembro durante una década, en los que se aboga por favorecer el contacto con dichos pueblos indígenas para su evangelización.
El juez Antonio Prudente, del TRF-1, ha considerado que "el nombramiento de un servidor involucrado con esa línea de actuación de las organizaciones misioneras representa un alto riesgo para la consolidada política de no contactar con estas poblaciones en respeto a su aislamiento voluntario".
"Contactar con los indígenas aislados sería "una flagrante violación del principio de autodeterminación de los pueblos indígenas y también de la función institucional de la propia Oficina de Indígenas Aislados, que entre otras atribuciones debe garantizar la protección de estos indígenas y de las tierras donde están", ha esgrimido.
La designación de Lopes fue muy polémica desde el primer momento porque su fuerte vínculo con la Misión de las Nuevas Tribus de Brasil, hoy rebautizada como Ethnos360, a la que se culpa de las muertes de indígenas amazónicos durante los 90 por la trasmisión de enfermedades como la gripe o el sarampión durante los esfuerzos evangelizadores.
Es como "poner a un zorro al frente de un gallinero", alertó entonces la investigadora de Survival International, Sarah Shenker. Según la ONG, "los misioneros evangélicos han intensificado sus esfuerzos para contactar con pueblos indígenas no contactados bajo la Administración Bolsonaro". De hecho, "la Misión Nuevas Tribus de Brasil anunció la compra de un nuevo helicóptero para llegar a los pueblos indígenas aislados en el Valle del Javari a principios de este año", ha recordado.
"UNA GRAN VICTORIA"
Por ello, Shenker ha celebrado esta decisión judicial como "una gran victoria para la campaña por la defensa de las tierras de las tribus no contactadas". La ONG ha destacado además que el cese de Lopes "supone un duro golpe para el presidente Bolsonaro", al que reprochan sus planes de evangelización y para abrir las tierras indígenas a la explotación comercial.
"El nombramiento de Lopes fue una declaración de guerra contra el derecho a la protección de sus territorios y el derecho a permanecer sin contacto. Era una parte crucial de la política explícita de Bolsonaro para destruir a los pueblos indígenas, desmantelar los equipos que protegen sus territorios y vender sus tierras a los madereros, mineros y agroganaderos", ha recalcado Shenker.
Beto Marubo, de la Unión de Organizaciones Indígenas del Valle del Javari (UNIVAJA), ha calificado de "nefasto" la breve labor de Lopes en FUNAI y ha confiado en que esta resolución judicial "sea una decisión definitiva". "La Justicia brasileña tiene que reconocer esa incoherencia, porque son circunstancias completamente incompatibles", ha esgrimido.
En todo el mundo hay más de cien pueblos indígenas no contactados, aunque la mayoría vive en Brasil. Shenker ha recordado que estas comunidades nativas "protegen hoy en día vastas extensiones de bosques de gran diversidad biológica".
"Con Lopes corrían el peligro de quedar totalmente expuestos, primero a los misioneros evangélicos y luego a los grandes negocios. Esto podría diezmar a pueblos enteros. Ahora tenemos un rayo de esperanza ", ha celebrado, al tiempo que ha advertido a Bolsonaro de que, "si persevera en sus políticas genocidas se enfrentará a una dura resistencia".