MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
La Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (SEFAC) ha mostrado su "total disposición" a colaborar con las autoridades sanitarias, así como con el resto de profesionales y agentes sanitarios, para contener la pandemia provocada por el nuevo coronavirus, declarada el miércoles por la Organización Mundial de la Salud.
En este sentido, SEFAC ha avisado de que las farmacias comunitarias y sus profesionales podrían ser "mucho mejor empleados de lo que lo están siendo hasta ahora", ya que es la red de centros de salud más extensa del país (22.000 farmacias y 50.000 farmacéuticos) y la "única presente" los 365 días del año y las 24 horas en muchos puntos de la geografía española, tanto en el medio urbano como rural.
"Los farmacéuticos comunitarios pueden contribuir a facilitar la detección de pacientes sospechosos de padecer la infección, así como a la disminución de la carga asistencial soportada por los centros sanitarios. Las farmacias comunitarias son establecimientos sanitarios privados de interés público, sujetos a la planificación sanitaria que establecen las comunidades autónomas, y ya prestan varios servicios básicos a la población", ha dicho al organización.
Por tanto, prosigue, el Sistema Nacional de Salud "no debe desaprovechar", en momentos críticos como el actual, el potencial asistencial que ofrecen unos profesionales como los farmacéuticos, cercanos a la población y expertos en el uso de los medicamentos.
Así, SEFAC ha abogado por la inclusión de los farmacéuticos comunitarios en las estrategias y protocolos de abastecimiento, prevención, detección, derivación y tratamiento de síntomas de las infecciones por Covid19, siempre en coordinación con el resto de las estructuras asistenciales de los servicios de Salud de las comunidades autónomas.
Dicho esto, la organización ha propuesto que las farmacias puedan participar en las campañas de prevención, en los cribados sistemáticos de casos sospechosos de padecer la infección por coronavirus, en la indicación de tratamientos farmacológicos y no farmacológicos en síntomas menores, la distribución de medicamentos y productos sanitarios, así como en los protocolos de actuación de centros sociosanitarios y de atención farmacéutica domiciliaria.