Noruega endurecerá aún más las restricciones y acelerará la vacunación con el objetivo de frenar a la variante Ómicron. "No hay duda: la nueva variante cambia las reglas. Por eso debemos actuar rápido y debemos actuar de nuevo", ha señalado el primer ministro, Jonas Gahr Stoere.
"La falta de acción ahora podría tener grandes consecuencias negativas para la sociedad, no solo para los servicios de salud y los municipios", ha avisado el Instituto Noruego de Salud Pública (FHI).
Noruega presenta así su cuarta ronda de nuevas medidas en dos semanas. La intención ahora del Gobierno es la prohibición de servir alcohol en bares y restaurantes, el cierre de gimnasios y piscinas a la mayoría de los usuarios o reglas más estrictas en las escuelas. También pretende recurrir a las fuerzas armadas y las farmacias para acelerar la vacunación con dosis de refuerzo.
El país está registrando niveles récord tanto de nuevas infecciones por Covid-19 como de hospitalizaciones, en parte debido a la propagación de Ómicron, que se espera que se convierta en la variante dominante en Noruega en los próximos días.
