MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
Un estudio liderado por los doctores Damián García-Olmo y Mariano García-Arranz, del Instituto de Investigación Sanitaria-Fundación Jiménez Díaz (IIS-FJD), ha demostrado que el tratamiento de la fístula perianal con células madre derivadas del tejido adiposo es "seguro" y, de hecho, "puede favorecer la curación duradera y a largo plazo".
La fístula perianal criptoglandular es una patología que afecta aproximadamente a dos de cada 10.000 personas al año, sobre todo hombres jóvenes, según datos de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés). Aunque a la mayoría de los afectados se les puede tratar con cirugía, el índice de recurrencia y los efectos secundarios asociados (entre otros, la incontinencia fecal) son "muy elevados", lo que conlleva una disminución su la calidad de vida.
Esta investigación, publicada en la revista 'Stem Cells Translational Medicine', nace a raíz de investigaciones previas realizadas por el mismo equipo. "Hace 17 años empezamos a explorar el uso de células madre derivadas del tejido adiposo como una opción de tratamiento de pacientes con fístula perianal compleja con la hipótesis de que sus capacidades antiinflamatorias e inmunomoduladoras podrían contribuir al proceso de curación", explica el doctor García-Arranz.
En las fases I y II de la investigación, demostraron que el uso de estas células madre autólogas era seguro para el tratamiento de fístulas de origen tanto criptoglandular como de Crohn. "Sin embargo, realizamos un estudio clínico de fase III para estudiar la fístula criptoglandular utilizando este tipo de células y no encontramos mejoría en el grupo de control, posiblemente debido al uso del producto celular y al diseño del ensayo", indica el especialista.
Por eso, este nuevo trabajo buscaba corregir los errores de diseño del estudio anterior y, así, poder determinar la eficacia de las células madre derivadas del tejido adiposo autólogas para el tratamiento de la fístula perianal criptoglandular compleja.
El estudio clínico se realizó en seis centros de la Red de Terapia Celular Española (TerCel), financiado por el Instituto de Salud Carlos III en la convocatoria de ensayos clínicos no comerciales. En él se incluía a 57 pacientes, de los cuales 23 pacientes recibieron 100 millones de células madre derivadas del tejido adiposo, además de pegamento de fibrina intralesional, y 21 recibieron solo este pegamento.
UN "CAMBIO SIGNIFICATIVO" A LOS DOS AÑOS DE TRATAMIENTO
A diferencia de estudios anteriores, en esta ocasión las células madre se expandieron utilizando el lisado de plaquetas humanas en el medio de cultivo, y evitando el uso de modelos animales. Al cabo de un año de seguimiento, no se percibieron diferencias entre los pacientes que recibieron células y los del grupo de control. Sin embargo, a los dos años sí se observó un cambio significativo: siete de los pacientes curados del grupo de control mostraron recurrencia, mientras que en el grupo al que se administró células solo la presentó un paciente.
"Los resultados finales indican que, en una evaluación a largo plazo, el doble de pacientes tratados con células madre derivadas del tejido adiposo autólogas y pegamento de fibrina se ha curado completamente de la fístula, en comparación con los que recibieron solo pegamento de fibrina", asegura García-Arranz.
Por su parte, García-Olmo puntualiza que el tratamiento "solo parece proporcionar una ventaja sobre un buen protocolo quirúrgico a los dos años del tratamiento". "Entonces los resultados son similares a los que observamos en estudios clínicos anteriores usando células madre mesenquimales autólogas", apostilla.