El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha asegurado que "en principio se dan las condiciones" para que Barcelona y Lleida pasen a fase 3 de desconfinamiento, pero ha añadido que prefiere esperar a la reunión que mantendrá esta tarde con la consellera de Salud de la Generalitat, Alba Vergés.
"Creo que las cosas en Cataluña se han hecho correctamente. Ha habido una actitud de prudencia, que yo comparto", ha destacado el ministro en una entrevista este miércoles en TV3, y ha valorado que los brotes en Lleida se han controlado con rapidez y contundencia.
Ha insistido en que el Ministerio y la Conselleria tienen una reunión bilateral a las 15.30 horas de este miércoles: "Quiero ser respetuoso. No quiero adelantar nada", tras lo que ha apuntado que el cambio de fase permitiría facilitar la movilidad de cara a Sant Joan con un poco más de tiempo.
También ha opinado que el estado de alarma ha funcionado, que ha sido un instrumento constitucional que ha permitido controlar la pandemia, y ha avisado de que se podría volver a activar si hubiera un rebrote "que no pudiese ser controlado sin controlar la movilidad en todo el territorio". "Pensamos que no hará falta si todo el mundo se comporta adecuadamente y si los mecanismos de vigilancia de las comunidades autónomas funcionan como están funcionando ahora", ha destacado Illa, que ha afirmado que se deberá actuar con contundencia y actuar quirúrgicamente en caso de rebrote.
Preguntado por si se optará por un confinamiento selectivo como ha propuesto la Generalitat si hay un rebrote, el ministro ha respondido que es una posibilidad y ha subrayado que en primer lugar les tocará actuar a las comunidades autónomas y el Gobierno respetará lo que decidan y seguirá habiendo mecanismos de coordinación: "Veremos si es necesario el confinamiento, a quién le toca decretarlo y en qué condiciones".
"Parece que no se darán las circunstancias de un contagio sostenido. Si hacemos lo que hay que hacer no creo que se vuelva a producir", ha asegurado Illa al volver a ser preguntado de nuevo por si el Gobierno volverá a activar el estado de alarma.
LA DECISIÓN DE LAS CCAA
Sobre la posibilidad de que la fase 3 en Cataluña durase 24 horas como anunció la consellera de Presidencia, Meritxell Budó, el ministro ha recordado que el estado de alarma se termina el domingo 21 de junio a medianoche, y ha sostenido que en fase 3 corresponde a cada comunidad si "levantar la nueva normalidad o no".
"Lo han hecho en Galicia, y lo han comunicado los respectivos responsables de Sanidad de País Vasco y Cantabria", y ha añadido que Cataluña podrá tomar esta decisión si Barcelona y Lleida pasan a fase 3, aunque ya la puede tomar en los territorios que ya están en esa fase.
FRONTERAS
Illa ha concretado que en los aeropuertos habrá un control primario visual y de temperatura y un control secundario "en el caso de que las primeras comprobaciones no resulten satisfactorias", y se hará un seguimiento de los viajeros, no de todos sino de manera aleatoria, para comprobar que están en un estado de salud correcto.
El ministro ha explicado que si se detecta un caso positivo de un turista se deberá aplicar el protocolo: haciendo una prueba PCR, y una encuesta epidemiológica a sus contactos estrechos, y se les podrá obligar a hacerse la prueba en el caso de que se nieguen, aunque ha destacado que hasta ahora ha habido colaboración.
PCR A CONTACTOS ESTRECHOS
Hasta ahora se ponía en cuarentena a los contactos estrechos, y ha anunciado que a partir de ahora se recomendará a las comunidades autónomas, tanto para turistas como para la población en general, hacer una prueba PCR, una medida que se anunciará en las próximas horas.
Illa ha destacado que España tiene capacidad para hacer estas pruebas a contactos estrechos sin síntomas, aunque ha matizado que no es una decisión tomada aún y se concretará próximamente: "Estamos en unas 40.000 PCR a la semana". Sobre si el Gobierno se plantea ampliar las competencias de Sanidad en detrimento de las comunidades autónomas, el ministro ha asegurado: "No, no estamos en esto", y ha destacado que el trabajo con el Govern ha sido fluido y huyendo de reproches.