Francia impondrá desde este fin de semana a los viajeros procedentes de España y Portugal que no estén vacunados un test Covid negativo realizado como mucho 24 horas antes, y no 72 horas como hasta ahora, ante el fuerte crecimiento de los contagios en esos dos países.
El secretario de Estado de Asuntos Europeos, Clément Beaune, ha hecho oficial este jueves la medida en una entrevista en la emisora 'France Info' recogida por 'EFE', en la que ha reiterado su recomendación a los franceses que todavía no hayan reservado sus vacaciones para que no vayan a España y Portugal. "Me parece normal y es mi responsabilidad decir que hay zonas con más riesgo que otras, y por tanto evítenlas cuando tienen posibilidad de hacerlo", ha subrayado refiriéndose a los dos países.
Beaune ha insistido en que no habrá mayores impedimentos a los desplazamientos: "Para España y Portugal, como para todos los países europeos, tenemos el mismo régimen, el certificado sanitario obligatorio para viajar" que va a controlarse "sistemáticamente" en todos los vuelos. Pero ha añadido que allí, según lo muestran los mapas europeos del nivel de riesgo que se actualizan cada semana "hay una situación difícil".
Por eso ha precisado que "para los que no están vacunados cuando vuelvan de esos dos países, de España y Portugal, como la situación es difícil habrán de hacerse un test en 24 horas y la medida debe entrar en vigor este fin de semana". Además, no se exigirá ninguna cuarentena, como no se exigirá cuarentena a ningún viajero procedente de otro país de la Unión Europea, ya que se ha acordado una regla común que es pedir el certificado sanitario europeo.
Francia está viviendo un rápido incremento de la incidencia epidémica -el miércoles se comunicaron 8.875 casos, más del doble que una semana antes- y las autoridades consideran inevitable la llegada de una cuarta ola en unas semanas. El departamento de los Pirineos Orientales, fronterizo con España por la costa catalana, es el que tiene la mayor tasa de incidencia del país, con 155 casos por cada 100.000 habitantes en siete días el pasado martes, con lo que casi cuadruplicaba la media nacional francesa.