MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
El responsable de la unidad de pediatría de Vithas Castellón, Vithas Valencia Consuelo y Vithas 9 de Octubre, Javier Miranda, ha aconsejado llevar a los niños al pediatra cuando no mejora del dolor de garganta durante el día, especialmente después de tomar agua, y tiene fiebre y dolores en los oídos, la cabeza o el estómago.
"Ante estos casos es conveniente la visita a su pediatra, quien valorará la necesidad de hacer una prueba estreptocócica para descartar la faringitis infecciosa bacteriana que tiene como germen causante más frecuente el estreptococo beta hemolíticos del grupo A. También es importante acudir al médico cuando el dolor de garganta va acompañado de ganglios inflamados y dolorosos en el cuello, y placas blancas en las amígdalas", ha dicho.
Y es que, en los meses de enero y febrero las consultas pediátricas por tos y dolor de garganta aumentan considerablemente, siendo los principales síntomas el enrojecimiento y dolor, los cuales suelen ir acompañados de dificultad al tragar, y en ocasiones de tos seca y persistente.
En un porcentaje elevado, la causa se debe normalmente a infecciones víricas que no mejoran con antibióticos y se curan solas. Sin embargo, el experto ha destacado la importancia de saber diferenciar cuando el dolor es provocado por una infección más grave, por lo que ha destacado la necesidad de pautar por un especialista un tratamiento médico.
Respecto a la toma de antibióticos, el especialista ha explicado que los antibióticos son importantes para tratar las infecciones bacterianas como la amigdalitis estreptocócica pero no las víricas. "Administrar antibióticos cuando no están indicados tiene sus riesgos, como la aparición de diarrea, infecciones por levaduras, reacciones alérgicas y el desarrollo de resistencia a los antibióticos", ha apostillado.
Por ello, ha subrayado la necesidad saber cuándo son necesarios, comentado que, a veces, se puede realizar el diagnóstico únicamente con la interpretación de los síntomas y la exploración de la garganta, pero otras se debe practicar una toma del moco de la garganta para la identificación rápida de la bacteria.
Para prevenir las enfermedades que causan dolor de garganta, independientemente de que sean víricas o bacterianas, el doctor ha aconsejado no permanecer en ambientes cargados, evitar la exposición a la calefacción excesiva, ventilar las habitaciones, aumentar la ingesta de líquido, una dieta sana para un buen estado el sistema inmunológico y fortalecimiento de las defensas y evitar con medidas higiénicas el contagio.
"Los virus y las bacterias que causan dolor de garganta se contagian entre las personas a través de las gotitas (condensación) de humedad en el aire (de un estornudo o tos) o en las manos de una persona infectada. Por esta razón, lavarse las manos, cubrirse la tos y los estornudos con un pañuelo de papel o con el antebrazo (en vez de la mano), limpiar los juguetes y no compartir los vasos es la mejor manera de prevenir el contagio de la enfermedad", ha zanjado.