MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
Las miembros del Hospital de Úbeda, en Jaén, Bienvenida Martínez y Carolina Navarro, han insistido en que en la práctica clínica es "fundamental" conocer el efecto nocebo de los medicamentos, además de aspectos no farmacológicos y efectos adversos no específicos, por sus consecuencias sobre la eficacia y seguridad de un tratamiento.
Así se han expresado durante el III Congreso Nacional de Técnicos de Farmacia, en el que han explicado que el efecto nocebo, aunque poco conocido, es "influyente" en la seguridad de un tratamiento y en muchas de las reacciones adversas atribuibles a los fármacos.
Esta manifestación es mucho más frecuente cuando los fármacos utilizados son genéricos y es un efecto real que no aparece en el prospecto ni en la ficha técnica de un medicamento. Esto es así, porque está relacionado con las propias expectativas negativas del paciente, especialmente si existe desinformación.
En este contexto, se han referido a los equivalentes farmacéuticos genéricos como blanco de esta desinformación. Han indicado que "se someten a los mismos procedimientos y controles que el resto de medicamentos y son autorizados por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios o por la Agencia Europea del Medicamento", lo que garantiza su eficacia y seguridad.
En cuanto a la denominación e identificación de los medicamentos genéricos, siguen la misma normativa que el resto de medicamentos, las instrucciones de uso, ficha técnica y prospecto, son iguales a las de los medicamentos de referencia y han demostrado a través de rigurosos ensayos clínicos su bioequivalencia con los fármacos de referencia.
Sin embargo, la apariencia de los genéricos puede ser distinta en color, tamaño, forma o embalaje a la de los medicamentos de referencia lo que podría confundir a algunos pacientes e influir negativamente en el cumplimiento terapéutico o en la aparición de errores en la medicación.
"A pesar de que comenzaron a comercializarse en España en 1997 todavía se sigue debatiendo sobre ellos, existe desinformación en los pacientes y recelo en los profesionales de la salud", han lamentado las expertas.
Las conclusiones de los diferentes estudios y la evidencia empírica indican que los efectos adversos diferentes son ejemplo de procesos cognitivos, siendo las expectativas uno de los mecanismos más importantes, capaces de influir en la fisiología de tal manera que las respuestas orgánicas del sujeto y la percepción de efectos secundarios adversos no fueron generadas químicamente.
En cambio, son resultado directo de la acción del fármaco, sino como consecuencia de las expectativas pesimistas propias, es decir, el efecto nocebo, surgidas en contextos terapéuticos de descrédito, especialmente si el fármaco utilizado es un genérico".
"El técnico en farmacia puede contribuir a la detección temprana de estas situaciones y aportar al paciente en el momento de la dispensación una información adecuada, útil, veraz y contrastada que contribuya a la eficacia y seguridad del tratamiento", han indicado Martínez y Navarro.
RECETA ELECTRÓNICA
En referencia a la receta electrónica, durante la jornada, la farmacéutica Lidia Bonet ha puesto de relevancia que el paciente sufre algunos inconvenientes porque les exige un mayor control de su medicación, puesto que no contempla la perdida de envases o comprimidos, o que el paciente haga un mal uso de su dosificación.
En este sentido, ha apuntado que es "fundamental" recibir una información adecuada para el uso responsable y eficaz de los fármacos.
"La prescripción no implica sólo recetar algo, implica además una visión integral del paciente y en ésta es muy importante dar al paciente una buena información e implicarlo en su tratamiento para garantizar el buen uso del medicamento, minimizar errores y reacciones adversas", ha indicado la experta.
CONTROL DE CADUCIDAD
La tecnología ha estado también muy presente en la potencia presentada por los miembros del Hospital Universitario de Cruces de Vizcaya, Roberto Ángulo y Alonso Berezi Bilbao Eguiluz, que han dejado patente que un sistema robotizado de almacenamiento y dispensación que los servicios farmacéuticos permite aumentar la seguridad y consigue un mayor control de los medicamentos almacenados, e incluso tener más datos sobre la utilización de los mismos así como del perfil farmacoterapéutico de los pacientes.
Sin embargo, estos sistemas no evitan todos los errores que pueden producirse en algunas de las fases y, además, pueden generar otras posibilidades de error o fallos del sistema, ya sean eléctricos, mecánicos o informáticos, pero revisar el correcto funcionamiento de todos los procesos ayuda a alcanzar mayor grado de seguridad en el proceso de almacenamiento y dispensación de medicamentos, según se ha especificado durante la jornada.
Por su parte, la miembro del servicio de Farmacia del Hospital Universitario Lucus Augusti de Lugo, Inmaculada Pumariño, ha presentado un estudio obre el impacto del tubo neumático sobre la medicación que transporta evaluando el protocolo actual del envío de medicación en su centro.
Considera que aunque el tubo neumático sea práctico, eficiente y tenga una buena relación coste y eficacia, no es apropiado para el transporte de todos los medicamentos ya que puede causar su desnaturalización o la aparición de otros procesos degradativos.
En esta degradación intervienen factores como la presión generada por la turbina sobre las balas portadoras o la velocidad a la que circula la bala de transporte. Por ello, a su juicio, sería adecuado que los centros sanitarios elaboren unas normas de envío de medicamentos generando y difundiendo un listado de medicación que no se debe enviar por tubo neumático.