La nueva normativa que ha entrado en vigor esta semana, y que obliga al uso de la mascarilla en espacios al aire libre, aunque haya distancia de seguridad, sigue levantando ampollas. Varias CCAA ya se han rebelado contra Sanidad por esta medida, que dice que también hay que llevar este elemento de protección incluso en playas y piscinas, algo que no gusta nada ahora que llega el buen tiempo.
El desconcierto que ha provocado esta medida, publicada esta semana en el Boletín Oficial del Estado (BOE), ha obligado al Ministerio de Sanidad que dirige Carolina Darias a recular, y este miércoles anunciaba que revisará la norma junto a las autonomías para ver si procede una modificación de la misma.
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Sanidad recula y matizará el uso de la mascarilla después de hacerlas obligatoriasAunque ya hay varias regiones que se han rebelado y han dicho que no obligarán a usar la mascarilla en espacios al aire libre si hay distancia social de 1,5 metros. Es el caso de Canarias y Baleares. Los gobiernos autonómicos de ambos archipiélagos han anunciado ya que en estos territorios se mantendrá la normativa que ya regía, de forma que no aplicarán la medida publicada por el Gobierno.
Baleares ha sido la primera CCAA en comunicar su negativa a esta norma. Dice que en su territorio no habrá que llevar mascarilla en las playas siempre que haya distancia, se esté con un único grupo de convivencia o para tomar el sol. El Gobierno autonómico seguirá manteniendo esta medida, acordada en noviembre en Consell de Govern y a través de un decreto de la presidencia. Sin embargo, la mascarilla sí se deberá llevar si se está en la playa en una reunión, como máximo de seis personas, con otro grupo de convivencia.
Por su parte, el Gobierno canario ha afirmado que seguirá aplicando el uso de la mascarilla como hasta ahora porque en la playa "hay que llevar mascarilla", pero "no siempre". "Nuestras normas siguen aplicándose, al menos por ahora, salvo que desde el Ministerio de Sanidad o el Consejo Interterritorial de Salud dicte alguna instrucción complementaria", ha señalado.
CRÍTICAS DE OTRAS CCAA
Pero estas regiones no son las únicas. Otras autonomías han hecho una serie de aclaraciones hasta que se modifique el texto. Es el caso de Cataluña y la Comunidad Valenciana. La Generalitat catalana ha pedido al Gobierno que no se confunda a la ciudadanía con la normativa de las mascarillas, tachando esta medida como una "incoherencia que nadie entiende".
Por su parte, el Ejecutivo valenciano cree que en espacios como las playas no debería ser necesario el uso de la mascarilla, porque "hay estudios que dicen que es un espacio seguro". Y Cantabria se ha sumado también a estas críticas. Desde esta región dicen que la nueva normativa está "descontextualizada", aunque reconocen que la mascarilla sigue siendo el "principal elemento protector" frente al Covid junto a la distancia de seguridad.