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La venta de terminales y dispositivos ha beneficiado a Vodafone España, que en su primer semestre fiscal ha conseguido ingresar un 2,1% más en comparación con el mismo periodo del año pasado, hasta los 2.090 millones de euros. Sin embargo, debido a a la gran competencia de precios del mercado y la tendencia al 'low cost', los ingresos por servicio cayeron un 0,7%, hasta los 1.866 millones de euros.
De su lado, los mayores costes publicitarios y de contenidos televisivos ha provocado que el Ebitda de Vodafone España haya caído un 0,6%, hasta los 445 millones de euros.
En cuanto a los clientes, la compañía registró un aumento en el sector móvil de 67.000 contratos, hasta sumar un total de 11,5 millones. En la banda ancha, cayeron en 82.000, hasta los 3,1 millones, mientras que los clientes de de televisión descendieron en 38.000, hasta los 1,8 millones. Su marca de bajo coste, Lowi, creció en 144.000 clientes móviles de contrato, hasta 1,3 millones.
Hay que recordar que Vodafone España anunció a mediados de septiembre un plan de reestructuración como parte de la transformación del operador. Mientras el ERE afecta principalmente a las tiendas propias, la compañía se ha comprometido a crear nuevos puestos de trabajo en el ámbito digital y tecnológico.
A nivel global, Vodafone abandona los números rojos entre abril y septiembre. En su primer semestre fiscal alcanzó un beneficio atribuido de 2.354 millones de euros, frente a las pérdidas de 1.818 millones del mismo periodo del ejercicio anterior.