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El banco suizo UBS ha presentado un beneficio neto de 1.733 millones de dólares en el tercer trimestre, un 24% menos que en el mismo periodo del año pasado. Aunque la cifra se ha situado ligeramente por encima de los 1.640 millones esperados por el consenso.
"Tenemos un fuerte impulso de nuestros clientes en unos mercados desafiantes", ha destacado la entidad tras publicar sus números, que incluyen una caída del 19% en el beneficio antes de impuestos, hasta 2.323 millones de dólares, "en comparación con un trimestre particularmente fuerte en el año anterior".
El ratio coste/ingreso fue del 71,8%. Los ingresos totales disminuyeron un 10%, hasta 9.115 millones de dólares, mientras que los gastos operativos disminuyeron un 6%, hasta 5.916 millones.
La rentabilidad sobre el ratio de capital CET1 fue del 15,5%. El banco recompró 1.000 millones de dólares en acciones en el tercer trimestre. "Nuestra exposición al aumento de las tasas de interés en todo el mundo y los controles de gastos contribuyeron al sólido desempeño del trimestre", ha destacado la entidad, que se ha mostrado "bien posicionada para enfrentar los desafíos del entorno macroeconómico actual".
Su consejero delegado, Ralph Hamers, ha comentado que "el entorno macroeconómico y geopolítico se ha vuelto cada vez más complejo. Los clientes siguen preocupados por la inflación persistentemente alta, los precios elevados de la energía, la guerra en Ucrania y los efectos residuales de la pandemia. En Suiza, muchos de nuestros clientes minoristas y de pequeñas empresas también se verán afectados por las interrupciones en el resto de Europa, y estamos enfocados en apoyarlos durante la crisis energética".