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Logo de Thyssenkrupp.picture alliance / Sebastian Gol / DPA - Archivo

Thyssenkrupp ha rendido cuentas este jueves ante el mercado y ha reportado un beneficio neto después de intereses minoritarios de 106 millones de euros en el último trimestre, frente a las pérdidas de 145 millones del mismo periodo pero del año anterior. Por tanto, el beneficio por acción fue de 0,17 euros. Esto se enmarca dentro de un buen trimestre, según la compañía, debido a los efectos positivos de las medidas de rendimiento y el aumento de los ingresos, especialmente en segmentos como Materiales y Servicios, Acero Europeo y Pistas Múltiples. Por todo ello, ha confirmado sus pronósticos para el ejercicio completo 2021/2022.

Las ventas en el conjunto del grupo aumentaron un 23% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, hasta los 9.000 millones de euros.

El EBIT ajustado también llegó a 378 millones, siendo bastante superior al reportado en el mismo periodo pero de 2020/2021, cuando se alcanzaron los 78 millones de euros. También se muestra una aceleración de este indicador respecto al trimestre anterior, cuando se alcanzaron los 232 millones de euros.

Eso sí, el flujo de caja fue negativo y claramente inferior al ejercicio anterior, hasta los -852 millones de euros, frente a los -32 millones de euros. Eso sí, entra dentro de las previsiones de la compañía, según el comunicado emitido. Los preparativos para una demanda más fuerte en los siguientes trimestres y los continuos cuellos de botella en la cadena de suministro con los retrasos resultantes en las cancelaciones de los clientes, especialmente de los clientes automotrices, llevaron a un aumento temporal en el capital de trabajo.

Por segmentos, Materiales y Servicios registró un aumento significativo en la entrada de pedidos, hasta los 3.700 millones de euros, y en las ventas, hasta los 3.300 millones de euros. El EBIT ajustado fue superior al del año anterior de 5 millones de euros.

En cuanto a Componentes Industriales, la recepción de pedidos disminuyó un 9% y las ventas, un 3%. Con 56 millones de euros, el EBIT ajustado del segmento estuvo por debajo del nivel del año anterior de 101 millones de euros. Esto se debió no solo a la disminución en el crecimiento de las ventas en 'Bearings', sino también al aumento en los costos de materiales, energía y fletes que no pudieron compensarse por completo con medidas de eficiencia y reducción de costos.

Tecnología del Automotriz experimentó un crecimiento tanto en la entrada de pedidos, de un 8%, como en las ventas, de un 9%. Este segmento se vio afectado por la escasez continua en el suministro de semiconductores y otros productos iniciales.

Acero Europeo mejoró la entrada de pedidos en los últimos tres meses de 2021, hasta los 479 millones de euros. Un efecto positivo provino de pedidos en las áreas de mantenimiento, servicio y electrónica marina, así como complementos a pedidos existentes en el negocio de embarcaciones de superficie.

Por último, en el segmento de Pistas Múltiples se experimentó un desarrollo muy dinámico en los nuevos negocios en general, con un gran aumento de los pedidos del 80%, hasta los 2.600 millones de euros.

"Hemos logrado avances importantes en la mejora de nuestro desempeño y en la reducción del enfoque de nuestra cartera. Pero todavía no estamos donde queremos estar, por eso no nos damos por vencidos y seguimos trabajando a toda velocidad en la implementación de nuestro plan. Nuestro próximo hito importante es alcanzar el punto de equilibrio en el flujo de caja. Esto está en línea con nuestro pronóstico para el año fiscal actual, que estamos confirmando claramente”, dijo Klaus Keysberg, CFO de Thyssenkrupp.

Para el conjunto del año, el grupo espera obtener unos beneficios netos de 1.000 millones de euros, con un EBIT ajustado que se mejore significativamente desde los 796 millones hasta una horquilla que abarca de los 1.500 millones a los 1.800 millones de euros.

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