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Tesla ha pasado este lunes por el confesionario al cierre del mercado. La fabricante de coches eléctricos ha declarado unos ingresos en el primer trimestre de 2021 por valor de 10.390 millones de dólares, un 74% más que hace un año. Una cifra por encima de las estimaciones, que hablaban de 10.290 millones.
También ha sorprendido con el beneficio por acción (BPA). Los de Elon Musk han presentado unas ganancias de 93 centavos frente a los 79 centavos esperados por el consenso de analistas.
Como es habitual tras la presentación de resultados, sus acciones han experimentado fuertes movimientos en Wall Street. Concretamente se han dejado un 4,5%, una caída que tampoco es una sorpresa. "Suele ser un valor que lo hace mejor antes de los resultados y tras estos suele venir una fase correctiva", explica José María Rodríguez, analista técnico de Bolsamania.
Tesla acumula siete meses consecutivos de ganancias, una buena racha que la llevó a cotizar al S&P 500 a finales del pasado mes de diciembre.
Estos no son los únicos dato que han dado a conocer los del Elon Musk durante en abril. A principios de mes comunicó que durante le primer trimestre ha entregado 184.400 vehículos, más del doble que en el mismo periodo del año anterior, cuando se entregaron 88.400.
A pesar de que sigue presentando unos ingresos récord, la automovilística está viviendo un convulso inicio de año. Sus acciones no registran importantes movimientos en este periodo, de hecho, avanzan un tímido 4,5% en los primeros cuatro meses. Además, está siendo investigada un accidente mortal en el que se ha visto implicado su modelo S.
