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Telefónica cerró el año 2023 con unas pérdidas de 892 millones debido a extraordinarios, entre los que destaca la provisión del plan de reestructuración de Telefónica España y un deterioro del fondo de comercio en Virgin Media O2 (VM02) derivado de la subida de las tasas de descuento y condiciones macroeconómicas en Reino Unido. En el cuarto trimestre estanco, la compañía perdió 2.154 millones.
El beneficio neto ordinario de la operadora de 2023, sin incluir provisiones ni extraordinarios, crece un 17,1%, hasta los 2.369 millones de euros.
Los ingresos del grupo aumentaron el año pasado un 1,6% y superan los 40.000 millones de euros (40.652 millones), el volumen más alto desde 2020. En el cuarto trimestre, las ventas se situaron en los 10.153 millones de euros. La operadora subraya en el negocio B2B se consolidó como una importante palanca de crecimiento en 2023, con un aumento orgánico de los ingresos del 6,3% en el conjunto del ejercicio.
El OIBDA de la compañía quedó en 11.390 millones el año pasado, lo que implica una caída del 11,4%.
La deuda financiera neta aumenta fundamentalmente por el incremento de la participación en Telefónica Deutschland y la reversión del efecto temporal de bonos híbridos en septiembre de 2023. La deuda financiera neta despidió el año en 27.349 millones de euros y la ratio de endeudamiento se situó en las 2,60 veces.
CUMPLE OBJETIVOS DE 2023 Y NUEVAS METAS PARA 2024
Con todo, Telefónica señala que ha cumplido todos los objetivos financieros fijados para el año pasado. Generó un flujo de caja libre de 4.227 millones, por encima del objetivo de alcanzar alrededor de 4.000 millones de euros. También cumple con objetivos de ingresos y OIBDA, que aumentan un 3,7% y un 3,2%, respectivamente, de manera orgánica, y de inversión, que se sitúa en el 14% de los ingresos en 2023.
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"Telefónica sigue ejecutando su hoja de ruta, sin detenerse ante la incertidumbre macroeconómica global, con la ambición y determinación necesarias para completar el proceso de transformación operativa puesto en marcha a partir de 2016. En 2023, Telefónica ha cumplido todos sus objetivos financieros y afronta con decisión los compromisos fijados en nuestro plan estratégico GPS para seguir construyendo una nueva Telefónica y liderar la nueva era digital”, ha declarado el presidente de compañía, José María Álvarez-Pallete.
Telefónica plantea nuevos objetivos para el conjunto de 2024, el primer ejercicio completo del plan estratégico GPS, consistentes en un crecimiento de los ingresos en torno al 1%, del EBITDA entre el 1% y el 2% y de la caja operativa (EBITDAaL-CapEx) también entre el 1% y el 2%. Contempla igualmente una cifra de inversión sobre ingresos de hasta el 13% y un incremento del flujo de caja libre superior al 10%. Con respecto al objetivo del crecimiento de caja para este año, tendrá como referencia los 2.308 millones de euros conseguidos con la nueva definición que Telefónica aplicará desde este ejercicio.
CONFIRMA REMUNERACIÓN AL ACCIONISTA
En cuanto a la remuneración al accionista correspondiente a 2024, la compañía confirma el reparto de un dividendo en efectivo de 0,30 euros por acción pagadero en dos tramos, en diciembre de 2024 (0,15 euros) y en junio de 2025 (0,15 euros), en línea con lo establecido igualmente en su plan GPS. Adicionalmente, amortizará el 1,4% del capital social, el equivalente a la autocartera existente a 30 de junio de 2023.
Por lo que se refiere al dividendo correspondiente a 2023, también de 0,30 euros por acción en efectivo, la compañía ya abonó el primer tramo (0,15 euros) el pasado mes de diciembre, y prevé abonar el segundo (0,15 euros) el próximo mes de junio.
En el año 2023, el flujo de caja por acción alcanzó los 0,70 euros, con lo que cubre ese dividendo de 0,30 euros por título totalmente en efectivo.
