Siemens Energy ha presentado este lunes los resultados de su segundo trimestre fiscal, en el que ha logrado reducir las pérdidas netas en un 26,2%, hasta los 189 millones de euros, frente a los números rojos de 256 millones registrados en el mismo periodo del año anterior. Así, el beneficio básico por acción (BPA) ha resultados en pérdidas de 0,25 euros, superiores a los 0,22 euros del segundo trimestre de 2022. La compañía ha rebajado sus previsiones de beneficios para el año por los retos del sector eólico.
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Resultados del primer trimestre de 2023 en España, Europa y EEUULos ingresos del periodo se han situado en 8.028 millones, un 23,8% más que en el segundo trimestre de 2022, tras sumar un incremento en los pedidos del 56,3%, en términos comparables, hasta los 12.256 millones de euros, donde destacan sobre todo Europa y Estados Unidos. Precisamente, entre los pedidos más importantes está uno de 1.700 millones de euros a Siemens Gamesa en Reino Unido.
"Los fuertes pedidos confirman nuestro muy buen posicionamiento en los mercados de tecnologías de transición energética, como la generación y transmisión de energía. Nuestras perspectivas ajustadas reflejan la fuerte demanda, así como el entorno de mercado continuamente desafiante en la industria eólica. El cambio de rumbo del negocio eólico sigue siendo la piedra angular para convertirnos en un líder rentable de la transición energética", ha dicho Christian Bruch, presidente y CEO de Siemens Energy.
Destaca la alemana que el beneficio antes de partidas especiales ha sido positivo en el periodo. En concreto, ha alcanzado los 41 millones de euros, frente a las pérdidas de 49 millones del mismo periodo del año anterior. La compañía ha explicado que las pérdidas de Siemens Gamesa se han visto más que compensadas por unos buenos resultados en todos los demás segmentos, liderados por Gas Services (GS).
Aunque el flujo de caja libre antes de impuestos ha marcado pérdidas de 294 millones de euros, un 16,4% menos que las pérdidas de este campo registradas en el segundo trimestre fiscal de 2022, de 351 millones de euros. Según Siemens Energy, las mayores salidas de caja de Siemens Gamesa se han visto compensadas en parte por el fuerte flujo de caja en otros segmentos, principalmente en Grid Technologies (GT).
Todo esto ha propiciado que la compañía ajuste sus previsiones para el año fiscal 2023. En concreto, espera ahora un crecimiento comparable de los ingresos de entre el 10% y el 12% (anteriormente entre el 3% y el 7%), mientras que cree que el margen de beneficios antes de partidas especiales se situará en torno al extremo inferior del rango de orientación del 1% al 3%, debido a los malos resultados de Siemens Gamesa en el primer semestre.
"Nuestras perspectivas ajustadas reflejan la fuerte demanda, así como el difícil entorno de mercado en el sector eólico", ha apuntado Bruch. En concreto, la firma germana se ha referido a los problemas en la cadena de suministro, la aceleración de las actividades en alta mar, así como contratos deficitarios heredados en el fabricante de aerogeneradores con sede en España como las razones de los continuos problemas a los que se enfrenta.