Samsung Electronics registró en el tercer trimestre un beneficio neto de 5.800 millones de wones, lo que supone un 37,7% menos que en el mismo periodo del pasado año, debido a la débil demanda de semiconductores. No obstante, en comparación con el segundo trimestre, el importe representa un aumento de más del 239% desde los 1.700 millones de entonces.
En concreto, la división de producción de semiconductores facturó 16.400 millones de wones, un 29% menos en términos interanuales, pero un 12% más intertrimestral. La compañía ha asegurado que la demanda de semiconductores ya ha comenzado a mostrar signos de recuperación.
La división de telefonía móvil facturó 44.200 millones de wones, un 7% menos que el año pasado, pero un 9% más los tres meses anteriores.
En general, los ingresos del tercer trimestre de Samsung cayeron un 12,2%, hasta 2.430 millones de wones.
En cuanto a las previsiones, Samsung considera que, si bien "es probable que persistan las incertidumbres macroeconómicas" en 2024, espera que las condiciones del mercado de memorias se recuperen. "De cara a 2024, la demanda de PC y móviles probablemente se beneficiará de la llegada de algunos ciclos de sustitución de los productos vendidos durante la fase inicial de la pandemia", ha añadido.