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Sacyr ha presentado este viernes sus resultados de los nueve primeros meses, periodo en el que ganó un 36% más, hasta los 92 millones de euros.
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De enero a septiembre, los ingresos cayeron un 6%, al pasar de los 3.456 millones de 2022 a los 3.244 millones cosechados en los nueve primeros meses de este año, y se distribuye de la siguiente manera: Europa 42%, Latinoamérica 49%, Estados Unidos y Canadá 6% y Otros 3%.
No obstante, el Ebitda ascendió a 980 millones de euros, un incremento del 12% respecto a 2022. La rentabilidad se situó en la cifra récord del 30,2%, 4,9 puntos porcentuales más que en 2022, mientras que el flujo de caja operativo se incrementó un 29%, hasta alcanzar los 487 millones de euros.
Sacyr explica que el crecimiento que viene experimentando es fruto de su transformación en "una empresa concesionaria de infraestructuras, rentable y con una continua creación de valor". De hecho, calcula que el valor de sus activos concesionales alcanzará los 3.254 millones de euros en diciembre de 2023, lo que representa un aumento de 443 millones de euros respecto de la última valoración que se realizó con motivo del Investor Day, en octubre de 2021.
Por otro lado, destaca que cerró el tercer trimestre con una deuda neta con recurso de 661 millones de euros. "Las operaciones de venta de Valoriza Servicios Medioambientales y Sacyr Facilities contribuirán a reducir drásticamente esta deuda: con posterioridad al cierre del tercer trimestre, Sacyr ha cobrado 420 millones de euros por la desinversión de Valoriza y espera completar la venta de Facilities antes de que acabe el año", ha remarcado.
Asimismo, destaca la liquidación anticipada de las opciones que Sacyr tenía sobre acciones de Repsol, que han supuesto una entrada de caja de 31 millones de euros. De esta manera, pone fin a la posición financiera que tenía en la energética española.
Y sobre la retribución al accionista, la compañía defiende que es uno de los "pilares del Plan Estratégico 2021-2025". Recuerda que durante 2023 ha elevado el dividendo hasta los 0,136 euros por título, entregando dos 'scrip dividend' pagados en enero y julio.
En cuanto a la evolución por áreas de negocio, Sacyr Concesiones obtuvo un Ebitda de 633 millones (+17%), "gracias a la buena evolución operativa de los activos, a la contribución de las autopistas Ruta 78 y Los Vilos, en Chile, y a que la totalidad de los ingresos de los activos concesionales está ligados a la inflación", ha apuntado.
Sacyr presume de seguir demostrando "su capacidad de poner en servicio nuevos activos concesionales", y destaca que en 2023 ha puesto en operación Rutas del Este (Paraguay) y próximamente lo harán otros tres activos: Autopista Pedemontana-Veneta (Italia), Ferrocarril Central (Uruguay) y Pamplona-Cúcuta (Colombia). Además, dentro de la gestión activa del porfolio de activos, la compañía vendió el 49% de Autovía del Eresma (España) y la N6 en Irlanda.
El área de Ingeniería e Infraestructuras ha logrado una cifra de negocios de 1.986 millones de euros y el Ebitda creció un 6%, hasta 322 millones de euros. "Esta división apuesta firmemente por la rentabilidad frente a volumen, por lo que ha incrementado el margen de Ebitda hasta el 16%, frente al 14% del mismo periodo de 2022", apunta Sacyr.
Si se excluye el efecto de la actividad en las autopistas italianas Pedemontana-Veneta y A3, la rentabilidad se sitúa en el 4,6%, frente al 3,7% del mismo periodo de 2022, comenta a continuación. Y señala que la cartera de la división cerró en 7.506 millones de euros, el 2% más que en diciembre de 2022. "Más del 52% de esa cifra corresponde a proyectos de Sacyr Concesiones y representa 34 meses de actividad", apunta.
Por último, detalla que Sacyr Servicios "ha visto reducido su peso tras los procesos de desinversiones de sus negocios de Medioambiente y Facilities", de forma que las cifras reflejadas incluyen las áreas de Conservación de Infraestructuras y Cafestore, ambas áreas alcanzan una cifra de negocios conjunta de 171 millones de euros y un Ebitda de 6 millones de euros.
