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La facturación de Orange España descendió un 4,6% en el primer trimestre de 2022, hasta los 1.132 millones de euros hasta marzo. Una caída que la compañía achaca a la presión competitiva y la estabilización del mercado de venta de dispositivos.
España continúa siendo el mercado "más desafiante" para Orange, según ha detallado su nueva consejera delegada, Christel Heydemann, quien ha subrayado las negociaciones para la fusión con MásMóvil como un camino para crear un actor sostenible con capacidad de inversión.
A nivel global, Orange ha ingresado un 0,7% más, 10.582 millones de euros, debido al crecimiento de sus filiales en Oriente Próximo y África, que compensó las caídas en las ventas en España y Francia.
El beneficio operativo del mayor operador de telecomunicaciones de Francia creció un 1% a nivel global, hasta los 2.620 millones de euros.
La compañía ha asegurado que mantiene sus objetivos para todo el año para 2022, incluido un crecimiento en las ganancias de entre el 2,5% y 3%.