Lloyds Banking Group registró en 2019 un beneficio neto de 3.006 millones de libras (3.592 millones de euros), lo que representa un 33% menos que el año anterior, según los resultados presentados este jueves. Las acciones de la entidad avanzan más de un 3%.
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Según un comunicado remitido este jueves, el grupo británico señala que logró un beneficio antes de impuestos de 4.393 millones de libras (5.254 millones de euros). Una cifra un 26% menor que la del anterior ejercicio, debido en parte a la imposición de un "recargo sustancial" sobre los llamados seguros de protección de pagos (PPI).
En este sentido, Lloyds está afrontando compensaciones a clientes a los que vendió fraudulentamente los PPI, un producto bancario que conllevaba unas cláusulas camufladas que hacían que el prestatario no se beneficiara del seguro cuando lo necesitaba. Su consejero delegado, António Horta-Osório, ha explicado que, además de los PPI, también afectaron a las ganancias "los niveles moderados de actividad del cliente" en, sobre todo, "los grandes mercados corporativos".
Por su parte, los ingresos netos alcanzaron durante 2019 los 17.142 millones de libras (20.492 millones de euros), un 4% menos que en 2018.
El consejero delegado del banco ha advertido de que aún existe cierta incertidumbre por los retos que plantea las "negociaciones sobre acuerdos comerciales internacionales en marcha", aunque destacó que "ahora hay un camino claro y algunas señales sobre previsiones mejoradas". "Durante 2019, el desempeño económico de Reino Unido se ha mantenido resistente a la significativa incertidumbre política y económica, gracias a niveles récord de empleo, tipos de interés bajos y al aumento de los salarios reales", ha detallado.
Lloyds anunció un dividendo de 3,37 peniques pero ninguna recompra de acciones.
